Periodista, exiliado español en México.

Su abuelo era el secretario del pueblo y su padre secretario del Ayuntamiento de Benissanet. Con 15 años comenzó a escribir como colaborador en El Llamp, periódico catalanista de Gandesa. Se trasladó a Barcelona con el objetivo de dedicarse al periodismo, aunque al no logró ingresos y ejerció como vendedor durante un tiempo hasta su vuelta a Benissanet.

Posteriormente volvió a Barcelona, donde estudió para practicante de medicina. Su abuelo falleció en 1929 y provocó que retornara a Benissanet, trabajando como secretario y maestro. En este momento creó junto al que posteriormente sería uno de los dirigentes de ERC, Martí Rouret, la revista quincenal La Rivada, de ideología republicana y catalanista.

Con la llegada de la Segunda República su revista se pasó a llamar L'Ideal de l'Ebre, convirtiéndose en la publicación oficial de la Federación Republicana Federal Socialista de la Terra Alta, próxima a Esquerra Republicana de Catalunya, donde estaba afiliado. Desde 1932 presidió los Jurats Mixtos del Treball de Tortosa y trabajó como colaborador en Lluita, de Tortosa, L'Avançada de Tarragona, Foment de Reus y L'Opinió de Barcelona. En esta época realizó una gran campaña en defensa del catalanismo, además de intentar propagar las ideas de Macià, Marcelino Domingo, Gassol y Rovira Virgili. También pasó a formar parte del funcionariado de la Generalitat en Tortosa.

En 1931 contrajo matrimonio con Cinta Font, unión de la que nació Artur Bladé Font. Los sucesos del 6 de Octubre de 1934 le obligaron a esconderse por miedo a ser detenido. En 1936 tras la vuelta del Estatuto de Autonomía, Bladé volvió a Tortosa, donde estaría asentado cuando estalló la guerra civil. Con el título La guerra dels meus trenta anys, recogió un conjunto de poemas que trataban sobre sus vivencias en la guerra. Durante el conflicto trabajó como secretario de su amigo Martí Rouret, consejero de Sanitat i Assisténcia Social con Companys, hasta que en 1938 pasó a formar parte del cuerpo de Sanidad del Ejército del Este.

Con el fin del conflicto bélico cruzó la frontera hasta Francia por Ares junto a Jaume Pi Sun-yer el 8 de febrero de 1939. Sin embargo ambos fueron detenidos y enviados al campo de concentración de Arles del Tet, de donde fueron liberados en poco tiempo gracias a su padre y Martí Rouret. Tras esto se escondió en Paris tres meses gracias a la ayuda de su amigo Francesc Estrada. Posteriormente se asentó en la Residence d'Intellectuels Catalans de Montpellier, hasta 1942. Sus vivencias en este periodo de exilio las recogió en L'Exiliada. A su vez en Montpellier estableció contacto con otros intelectuales catalanes. Finalmente logró embarcar hasta México en 1942, trasladándose primero desde Marsella hasta Casablanca con el barco Marechal Lyautey y desde ahi en el vapor Nyassa.

En el país azteca ejerció como periodista tras trabajar antes en otros sectores. Escribió como redactor en Última Hora y en el Journal Français de Mexique y como colaborador en El Nacional. A su vez destacó también por su gran actividad en diversas revistas catalanas con edición en México y otros órganos del exilio: Full Català, Revista de Catalunya, La Humanitat, Portaveu d'Esquerra Republicana de Catalunya, La Nostra Revista, Pont Blau y Xaloc. En México realizó el grueso de las obras en las que recordaba su tierra natal: Geografía espiritual de Catalunya, Benissanet, Crónica del país natal, Gent de la Ribera d'Ebre... En 1956 volvió a Catalunya con un viaje que es relatado posteriormente en artículos para La Nostra Revista y Pont Blau y que a continuación recopiló en el libro Impressions d'un viatge a Catalunya. Esta obra fue premiada en 1958 con el premio Concepció Rabell de los Jocs Florals de Mendoza.

Otros de los premios que recibió fueron: el Premi de Cultura Catalana, de París, el Premi del Centenari del Mestre Fabra, el Premi Copa Artística, el Premi Rovira i Virgili de Òmnium Cultural y Premi Jaume Tió de Tortosa. A inicios de 1961 volvió de manera definitiva a España, instalándose entre Benissanet y Tarragona, hasta que en 1986 falleció su esposa y decidió mudarse a Barcelona. En dicha ciudad continuó con su labor periodística en publicaciones y como colaborador en publicaciones locales. Recibió la Cruz de San Jordi de la Generalitat de Cataluña. Falleció en 1995 en Barcelona.