Profesor, humanista y pacifista español exiliado de la Guerra Civil. Hijo del cónsul italiano destinado en Almería (España), Antonio Brocca y Migna y de la cantante de ópera española, Carmen Ladehessa Ramón Vicente. Casado con Rosa García López, tuvo cinco. Miembro de la Unión General de Trabajadores (UGT) de 1925 a 1928 y de nuevo desde 1931. También fue miembro de la Agrupación Socialista de Almería desde 1931. En 1928 se marcha a Argentina donde pasó algún tiempo visitando a su hermano. A principios de la década de 1930 fue director de la escuela de Viator (Almería, España) y durante su estancia en el pueblo luchó por los derechos de los ciudadanos abogando por la consecución de mejoras como la construcción de una fuente de agua potable. En 1932 fue presidente del Jurado Mixto Rural de Almería. Desde 1933 a 1937 fue inspector escolar y profesor de universidad en Madrid. En 1937 fue secretario en el Consejo Nacional de Asistencia Social. En 1938 fue director del orfanato infantil de Prats-de-Mollo-la-Preste (Pirineos Orientales, Francia) donde acogió a niños desamparados de ambos bandos de la guerra. Desde pequeño se declaró pacifista y antimilitarista. Durante los años previos al estallido de la guerra y durante la contienda, se decantó por el bando republicano pero siempre para defender los derechos humanos, defendía la lucha contra el fascismo siempre de forma pacífica. En 1936 participó en un mitin organizado por Juventudes Libertarias donde pedía al pueblo dejar de lado la guerra. Formó parte de la Organización Internacional de Resistentes a la Guerra (IRG) y fue el representante español en las reuniones internacionales del movimiento por la paz realizadas por diferentes organismos. Dio apoyo moral, económico y alimentario a centenares de familias. Debido a su vocación humanista Escribió varios artículos atacando a los sectores que promovían la violencia. Estuvo muy involucrado en una propuesta del gobierno republicano de fundar Escuelas Laicas y fue profesor de los campamentos de verano promovidos por la República para alejar a los niños del conflicto. Después de la guerra fue capturado y encarcelado de un campo de concentración francés del que logró escapar. Llega como exiliado a Veracruz (México) el 16 de octubre de 1942. Viajó solo, pero años más tarde se reunieron con él en México su mujer y uno de sus hijos, Helio. Recibe ayuda de la JARE. Fallece en Ciudad de México (México) en junio de 1950