Persona
Lardizábal Uribe, Miguel de (1744-1824)Otras formas
Puebla (México) 1744 - Vergara 1824
Político español. Regente, ministro universal de Indias, rector del seminario de Vergara, autor del Manifiesto absolutista de 1811.
Hijo de Francisco Ignacio Lardizabal Elorza y de Isabel María de Uribe-Castejón. Hermano de Manuel de Lardizábal Uribe, entre otros.
Realizó sus primeros estudios de letras, en el seminario Palafoxiano de Puebla y se traslada a España en 1761 y realiza estudios de teología en la universidad de Valladolid. En 1786, publica "Apología por los Agotes de Navarra y los Chuetas de Mallorca" (Madrid). En 1798, Godoy lo desterró a las provincias vascongadas, donde poco después fue nombrado director del seminario de Vergara (1801-1808).
Consejero de Indias, juró la Constitución de Bayona, el 23 de julio de 1808. En septiembre de 1809, se encontraba en Murcia. Representante de Nueva España en la Junta Central, al salir ésta de Sevilla, pasó a Chiclana, el 13 de enero de 1810. A principios de 1810, es designado miembro de la primera Regencia que duró hasta el 28 de octubre de 1810; tras la disolución de ésta, fue confinado en Alicante. En septiembre de 1811, publicó un manifiesto, donde atacaba la legitimidad de las Cortes, por lo que es trasladado a Cádiz y condenado a muerte, pena que fue conmutada, por el destierro en 1812. Se refugió en Gran Bretaña, donde permaneció hasta 1814, en que regresó a España. Tuvo un papel importante en la redacción del decreto de Valencia del 4 de mayo de 1814, por el que Fernando VII, le nombra ministro universal de Indias (1814-1815), del que fue titular y desde donde preparó la expedición de Morillo. Fernando VII (1784-1833), le encarga secretamente negociar su matrimonio y el de su hermano, con dos infantas de Brasil, pero a pesar de las precauciones tomadas, la noticia llegó al Ministro de Estado, Pedro de Ceballos Guerra (1759-1839), quien suprimió el Ministerio de Indias (1815). Perdió la confianza del rey y tras la disolución de su ministerio (18 de septiembre de 1815), fue encarcelado en Pamplona. Al recobrar la libertad, volvió a dirigir el Seminario de Vergara, hasta su muerte. En 1815, recibió la Gran Cruz de Isabel la Católica.