La fuente representa a la diosa madre Cibeles, identificada en el panteón griego con Rea, madre de los dioses olímpicos y símbolo de la tierra y la fecundidad, sobre un carro tirado por leones (Atalanta e Hipómenes).

Proyectada para formar parte de los jardines de La Granja a finales del siglo XVIII, conforme a un diseño de Ventura Rodríguez; Carlos III finalmente decidió colocarla en el Paseo del Prado, dentro de un proyecto que incluía una serie de fuentes com motivos mitológicos (incluyendo la Fuente de Neptuno y la Fuente de Apolo). En 1895 se traslado al centro del plaza donde se sitúa hoy.