Jurista, ensayista, poeta, periodista y conferenciante, exiliado español. Trabajó como periodista en 1921 y a continuación estudió jurisprudencia y ejerció como fiscal. Trabajaba como colaborador en las publicaciones periódicas Cierzo, Noreste y en Heraldo de Madrid. En 1935 se editó el libro Revista de los tribunales. Tribunales correccionales. Con el comienzo de la guerra civil española participó en el sitio del Alcázar de Toledo, ejerció como fiscal en la causa contra los golpistas en el Tribunal Popular de Madrid y en 1938 lo fue también en el Tribunal Supremo de Madrid. Finalmente con la derrota republicana cruzó la frontera hasta Francia, donde pasó por un campo de concentración. El 19 de marzo de 1940 logró arribar a Cuba y estrechó contacto con la Casa de Cultura y la Asistencia Social. Reanudó su labor periodística, además de ejercer como locutor y escritor para diversas emisoras de radio. Ocupó la secretaría de la Alianza de Intelectuales Antifranquistas, creada en 1944, además de integrar la Unión Democrática Española. También fue delegado en la convención de la Federación de Organizaciones de Ayuda a los Republicanos y ejerció de representante de la Confederación de Españoles Antifranquistas. Escribió como colaborador en revistas cubanas como Carteles, Bohemia, Información, Acción, Ultra, Europa, Policía, España Republicana, Gaceta del Caribe. A su vez fue docente de Derecho Penal en la Escuela Libre de La Habana y en 1949 trabajó como profesor titular de Criminología de la Universidad de Oriente. Ocupó también la secretaría del Círculo Republicano Español y mantuvo contacto con el movimiento revolucionario contra Batista. Tras el derrocamiento de la dictadura en 1959, fue director de Prisiones, así como profesor de la Escuela de Periodismo de la Universidad de La Habana y diplomático en Italia, Grecia y Chipre.