Militar y estadista, II marqués de Vallgornera, marqués de Torremejía, oficial de Guardias. Perteneciente a la ilustre familia hacendada del noble y antiguo linaje catalán originario de Vallgornera (Girona). Hijo mayor de Felipe Baldrich Vallgornera, señor y barón del castillo de Rourell, y de María Ana de Veciana, restringió a ese alto nivel social el círculo de sus relaciones. En 1827, contrajo matrimonio con la hija de los marqueses de Torremejía, Ramona Osorio Leiba. Habiendo enviudado en 1838, dos años después se casó con la hija del conde de Mejorada y viuda del coronel Luis Fernández de Córdoba Pimentel, Concepción Ortiz Sandoval Arias de Saavedra.

Al estallar la Guerra de la Independencia, se incorporó como subteniente del primer tercio ligero de voluntarios de Tarragona y después al Real Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Cataluña; fue hecho prisionero y conducido a Francia, donde permaneció hasta el final de la contienda. Diputado suplente por Cataluña a las Cortes, militar de la Embajada de España en París, director general del Colegio Militar de Alcalá de Henares, procurador en Cortes por Tarragona, diputado a Cortes por Barcelona, colaborador de la Revista de Madrid, ministro de la Gobernación, miembro del Consejo Real, senador por Gerona, entre otras.

Fue profesor de fortificación y artillería en la Academia de Caballeros Cadetes de Guardias de Infantería, militar en la Embajada española de París, designarle vocal suplente de la Dirección General de Estudios,1836 empezó a dirigir en comisión el recién creado Colegio Científico de Alcalá de Henares, y diputado por Barcelona y senador por Tarragona.

Asimismo, desde 1848 fue consejero real y desde mediados de 1852 vocal de la Suprema Asamblea de la Real Orden de Isabel la Católica en la categoría de Gran Cruz, caballero de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo y de la Orden de Carlos III.

Falleció en Madrid el 26 de septiembre de 1864 sin descendientes. Por esta razón sus bienes, a excepción de los vinculados al título de Vallgornera, legados con éste a su sobrina mayor María Antonia Rubinat Baldrich, pasaron a su viuda, María Concepción Ortiz Sandoval, que disfrutaría además de una pensión de quince mil reales.