Diputado, juez español.

Procedente de una familia de la oligarquía de Lucena (Córdoba), era hijo de Antonio Mateo Ramírez de Arellano Alba y de María Inés Baena Carrero Mena. Cursó leyes en la Universidad de Granada, siendo porcionista del Colegio Imperial, pero hubo de detener sus estudios durante la Guerra de Independencia. Tras la guerra finalizó su carrera, con matrícula de abogado en la Audiencia de Extremadura en 1818. En 1819 dio inicio a su carrera política ocupando el cargo de síndico personero de Aguilar de la Frontera (Córdoba), donde también fue alcalde en 1820. Se adhirió al levantamiento de Riego y formó parte de la Sociedad Patriótica de Baena. Participó de la política del Trienio Liberal, siendo juez de primera instancia (1821-1823) en Málaga y resultando diputado en Cortes por Córdoba en 1822. Con el retorno del absolutismo fue arrestado en Cádiz y procesado. Con la vuelta del régimen liberal tras la muerte de Fernando VII en 1833 fue líder provincial del Partido Progresista en Córdoba y en 1835 retomó su carrera judicial como juez de primera instancia. En las elecciones generales de 1837 resultó elegido diputado, pero su elección fue invalidada por las Cortes. Formó parte de la Comisión Militar de Defensa ante los sucesos carlistas en Andalucía. En el verano de 1843, durante el pronunciamiento contra Espartero, asumió el cargo de Jefe Político de Córdoba, siendo destituido rápidamente. Tras ello se dedicó únicamente al ejercicio de la abogacía y el comercio hasta su muerte en Córdoba en 1867.

Dejó escrita una Memoria sobre el derecho de las hembras a suceder en la Corona de España (1833).

Contrajo matrimonio en dos ocasiones, la primera con Juana Povedano, con la que tuvo un hijo, Antonio. Se casó en segundas nupcias en 1812 con Josefa Gutiérrez de Salamanca y Pretel, con quien tuvo cuatro hijos Carlos, Manuel, Feliciano y Teodomiro.