La Organización Internacional del Trabajo (OIT) es una agencia especializada dentro del organigrama de la Organización de las Naciones Unidas cuyo cometido es perseguir el avance social y económico mediante la elaboración de protocolos, disposiciones técnicas y proyectos internacionales dentro del ámbito laboral. Fundada en abril de 1919 bajo el auspicio de la Liga de Naciones, es la primera agencia especializada de la ONU en cuanto a antigüedad. Tiene 187 Estados miembros (186 de los 193 miembros de la ONU, además de las Islas Cook). Su sede se encuentra en Ginebra (Suiza).

Las disposiciones de la OIT pretenden asegurar un mundo laboral accesible, productivo y sostenible siguiendo los principios de libertad, igualdad, seguridad y dignidad. Se sustenta en 189 convenciones y tratados, de los cuales ocho son considerados como fundamentales de acuerdo con la Declaración de Principios Fundamentales y Derechos del Trabajo de 1998. Con ello protegen la libertad de asociación y negociación colectiva, además de luchar por la eliminación de los trabajos forzados, el trabajo infantil y la discriminación en el ámbito laboral. Además, la OIT es uno de los actores principales en la articulación de la legislación laboral internacional.

Su organización se articula en una estructura tripartita y todos los protocolos, políticas y programas se debaten y aprueban por los representantes gubernamentales, sindicales y trabajadores. Las tres instituciones que dan forma a esta organización son la Conferencia Internacional del Trabajo, que se reúne anualmente para formular protocolos laborales de carácter internacional; el Comité Ejecutivo, que decide las políticas y el presupuesto de la agencia; y la Oficina Internacional del Trabajo, una secretaría permanente que administra la organización e implementa las actividades y proyectos aprobados. Esta secretaría la lidera el Director General, que es elegido por el Comité Ejecutivo.

En 1969, la OIT fue galardonada por el Premio Nobel de la Paz por promover la paz y fraternidad entre las naciones, promocionar el trabajo digno y la justicia para los trabajadores, además de proveer de asistencia técnica a las naciones en vías de desarrollo. En 2019, la agencia creó la Comisión Global para el Futuro del Trabajo, que elaboró un informe de diez recomendaciones para los gobiernos para superar los desafíos del siglo XXI en el ámbito laboral; que incluyen la garantía del trabajo universal, la protección social desde el nacimiento hasta la tercera edad y promover la formación permanente. Además, la OIT es miembro del Grupo de Desarrollo de las Naciones Unidas, una coalición de organizaciones que trabajan para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.