Institución
Masa Coral de Madrid
desde 1919 hasta 1978
En 1918 Rafael Benedito organizó una serie de conciertos matinales, celebrados en el Gran Teatro de Madrid. En uno de ellos e interpretó la Novena sinfonía de Ludwig van Beethoven con gran éxito. A propuesta del impresor de origen alemán afincado en Madrid, José Blass Mayer, que había participado en el concierto, se planteó la creación de una agrupación similar a las que existían en otras localidades españolas. Ese fue el origen de la Masa Coral de Madrid, que se presentó el día 15 de mayo de 1919 con dicha obra de Beethoven y "Escena de la consagración" de la ópera Parsifal de Richard Wagner, dirigida por el maestro Benedito.
En la década de los veinte desarrolló una gran actividad, actuando en el Teatro Real, Monumental Cinema, Teatro de la Princesa, Teatro de Apolo, Colisevm y Teatro de la Zarzuela, entre otras salas. Los conciertos eran en solitario o en colaboración con diversas entidades de interpretación, como la Orquesta Sinfónica de Madrid, Orquesta Benedito, Orquesta Filarmónica y Banda Municipal de Madrid. También cantó fuera de la capital, por ejemplo en el Teatro Calderón de Valladolid, el 10 de abril de 1926, y en el Teatro Campoamor de Oviedo, el 28 de mayo de 1927, invitada por la Sociedad Filarmónica de esta ciudad. Sus programas incluían obras de grandes autores y piezas populares, cosechando siempre grandes aplausos. En esta etapa desarrolló una encomiable labor docente, como fue la de organizar clases gratuitas de solfeo, canto, piano y violín dirigidas a sus miembros y asociados. En junio de 1928, todavía muy joven, ingresó como tenor quien llegaría a ser uno de los directores de orquesta más importantes de su tiempo, Ataúlfo Argenta.
En la década siguiente se formó un conjunto orquestal propio, por lo que pudo ampliar su repertorio con obras sinfónico-corales. Un hito importante fue su participación, junto con la Orquesta Filarmónica de Madrid, dirigidos por Bartolomé Pérez Casas, en la puesta en escena de la tragedia Medea de Séneca, traducida por Miguel de Unamuno, con una selección de música de Christoph Willibald Gluck; la representación, que tuvo lugar en el Teatro Romano de Mérida, el 18 de junio de 1933, fue dirigida por Cipriano Rivas Cherif y protagonizada por la actriz Margarita Xirgu.
Además de los propios, la sociedad organizó conciertos de cámara, como el que tuvo lugar el 31 de marzo de 1935 con la pianista María Isabel Zancajo y el bajo cantante Enrique de Valenzuela, acompañado al piano por Gerardo Gombau. La junta directiva, formada en junio de ese año, estaba presidida por Ángel Ossorio y Gallardo, siendo vicepresidente Eduardo Alfonso Hernán; secretario, José Rojas Sánchez; vicesecretario, Miguel Frutos Arribas; tesorero, Carlos Machuca Rodríguez; contador, Alfredo Ortiz Bertucci; bibliotecarios, Andrés Jiménez. Mesonero y José Alonso López; vocales: José Blass Mayer, Carlos Palancarejo Brun, Consuelo Olmedo y María Vilches.
Con la agrupación, colaboraron músicos como el director y compositor Joan Lamote de Grignon, que presentó en Madrid, el 26 de enero de 1936, su oratorio La noche de Navidad para soprano, barítono, coro y orquesta; además de intérpretes como el pianista José Cubiles. En junio de 1936 participó en la banda sonora de la película Nuestra Natacha de Benito Perojo. Durante los primeros años de la guerra civil española, ante la ausencia de Benedito, se hizo cargo de la dirección el compositor Pablo Sorozábal, que también dirigía en aquel momento de la Banda Municipal. En los años cuarenta fijó su sede en el Real Conservatorio de Música y Declamación, colaboró con la Sinfónica de Madrid y la Orquesta Nacional y fue dirigida en algunos conciertos por Bartolomé Pérez Casas y José María Franco. Siendo todavía muy joven, mientras se formaba musicalmente, y años antes de convertirse en una intérprete de fama internacional, Teresa Berganza cantó en la agrupación.
En 1950 grabó, con la Orquesta Filarmónica de Madrid, Canto a la primavera, obra del compositor Eduardo Aunós. Después de la muerte de Rafael Benedito, el 8 de septiembre de 1963, la agrupación mantuvo actividad hasta finales de los años setenta. En 1977 registró para el sello Columbia, junto con la Banda de la Policía Armada de Madrid, Canto a Jaén de Emilio Cebrián Ruiz, dirigidos por Rafael Benedito Astray, hijo del fundador.
En la Biblioteca Musical Víctor Espinós del Ayuntamiento de Madrid se conserva el fondo documental de la Masa Coral de Madrid, creada en 1919 por Rafael Benedito.