No se sabe cuándo fue fundado exactamente el Convento de Santa Marta de Ortigueira, pero se calcula que ocurrió hacia 1302. Estaba situado extramuros, unido a la muralla y próximo a la puerta de la Villa. El concejo de Ortigueira concedió diversas limosnas para la fundación del convento y a cambio recibió autorización para recaudar tributos al mismo a partir del 2 de marzo de 1417. Los frailes se dedicaban principalmente a la predicación y la confesión. A lo largo de la historia del convento, su número osciló entre los 4 y los 15.

El convento dispuso de casa de estudios hasta la reforma de la Orden de Predicadores en el siglo XVI. En 1621, tras la supresión de sus estudios, el convento estableció una cátedra de teología moral. Posteriormente se añadieron cátedras de filosofía, gramática e instrucción primaria. El edificio original, construido en la primera mitad del siglo XIV, fue destruido en un incendio de época indeterminada. Después de sucesivas reparaciones, los frailes erigieron un edificio de nueva planta entre 1748 y 1776. A finales del siglo XVIII, el convento sólo contaba con una renta de 14.629 reales de vellón.

El convento participó en la organización de la resistencia a las tropas francesas durante la Guerra de la Independencia (1808-1814). También tuvo que acoger temporalmente a los frailes del suprimido Convento de Santo Domingo de Viveiro durante el Trienio Liberal (1820-1823) debido a la Real Orden de 16 de mayo de 1821 sobre el arreglo de conventos de la provincia de Galicia, en cumplimiento de la Ley sobre monasterios y conventos de 25 de octubre de 1820. El convento fue suprimido por los decretos de exclaustración de 1835.