El convento de la Concepción de León, se localiza intramuros de la ciudad, en la que fuera casa familiar de los Conde de Luna.

Es fundado en 1516 por doña Leonor de Quiñones y su hermano fray Francisco de los Ángeles Quiñones, Comisario General de la Orden franciscana.

El convento se funda cumpliendo los deseos de la madre de ambos, Juana Enriquez, quien deja en su testamento todas las cosas necesarias para fundar en su Casa-Palacio, en 1515, un Convento dedicado a María Inmaculada, junto a todos los ornamentos de su

capilla y dos retablos.

El nuevo convento estaría regido por la abadesa Francisca de Quiñones, hermana de doña Juana y su sobrina procedentes del convento franciscano de Palencia. Contó con los bienes aportados por la fundadora principal, y con las dotes de sus monjas y los conseguidos por donación, limosnas, rentas, bienes muebles.

Siempre hubo una descendiente de los distintos Condes de Luna como profesa en el convento.

El edificio sería ampliado y remodelado en varias oportunidades, gracias a los ingresos que se recibe de diferentes fuentes, lo que permite agrandar el edificio, adquiriendo las casas que con él limitan, en las cuales se construyen posteriormente la iglesia y el claustro que se encuentran a su espalda.

La riqueza y fortuna del convento le permitió funcionar como casa madre, fundando otros cenobios como, el de Ponferrada, Villafranca del Bierzo y Toro.

Un incendio acaecido en 1704, obligó a las religiosas a desalojar el convento y alojarse en el cercano monasterio benedictino de Santa María de Carvajal y utilizar una buena parte de las rentas conventuales, en las obligadas labores de reconstrucción.

En 1808, la comunidad del Convento consta de una priora y catorce monjas. La renta anual es, entonces, de treinta y seis mil reales.

La ocupación francesa no les afectó pero con posterioridad, con motivo de la Revolución en España, La Gloriosas,en 1868 la Comunidad se vio obligada de nuevo a abandonar su convento, para refugiarse en el de las Clarisas Descalzas de la ciudad, hasta 1875.

Después su actividad continua con normalidad en el monasterio hasta nuestros días, que continúa activo.