Convento fundado por Francisco Camacho Martín quien, al no disponer de herederos, ofreció parte de su patrimonio para tal menester. La noticia fue acogida positivamente por la comunidad de monjas de Villanueva de la Fuente (Ciudad Real) que, en 1610, pidió su traslado a Membrilla, instalándose en la vivienda del propio benefactor hasta la construcción del convento. No obstante, el promotor real de las obras fue su hermano, Bartolomé Camacho Martín, pues en sus últimas voluntades (1621) determinó la venta de sus bienes para adquirir la vivienda colindante y ofrecer un recinto más amplio. Posteriormente, la Real Cédula de 30 de julio de 1623 confirmó la escritura fundacional del convento.

En 1837, con el proceso desamortizador de Mendizábal, la comunidad sufrió una enorme merma de su patrimonio, produciéndose una amenaza de cierre. Sin embargo, no fue hasta 1936 cuando, como consecuencia de un incendio, el convento fue temporalmente clausurado, siendo reabierto en 1942 cuando las obras de rehabilitación aún no habían finalizado.

Finalmente, en los últimos años de la década de los 90 del siglo XX, el convento cerró definitivamente ante la pérdida total de religiosas.

A principios de diciembre de 2015, el Ayuntamiento de Membrilla formalizó su opción de compra del convento, la cual se hará efectiva antes de abril de 2016. Una vez rehabilitado, el recinto albergará una residencia para mayores.