Historia Archivística:
La documentación ingresó en el Archivo Histórico Nacional a partir del año 1959 y hasta 1962, procedente del Ministerio de Hacienda y de la Delegación de Hacienda de Madrid, organismos que, recogen a su vez la de otros, históricamente encargados de la gestión de los impuestos, como la Superintendencia General y las respectivas Superintendencias provinciales, creadas por Carlos II, y las primeras Intendencias provinciales, establecidas en España a partir de 1711.
Historia Institucional / Reseña Biográfica:
La documentación de 'Títulos Nobiliarios', corresponde a la producida por la gestión del pago de los impuestos de Lanzas y Medias Anatas.
El organismo productor más antiguo que aparece es el de la Contaduría General de Valores que, en el ejercicio de sus funciones, formaba las liquidaciones de las cuentas correspondientes a cada título, mandándolas a las Contadurías provinciales, donde se presentaban a los titulares para la satisfacción del pago de los impuestos correspondientes a los Títulos nobiliarios que poseían.
A mediados del siglo XIX, como consecuencia de la gran reforma tributaria de Alejandro Mon (artº 15 de la Ley de 23 de mayo de 1845), los derechos de Lanzas y Medias Anatas se refunden en un nuevo impuesto denominado 'Impuesto Especial sobre Grandezas y Títulos' en virtud del Real Decreto de 28 de Diciembre de 1846, suprimiendo aquellos, con efectos desde el 1 de enero de 1847.
Según el Real Decreto, la Dirección General de Contribuciones Directas, dependiente del Ministerio de Hacienda, asumió la dirección y administración del nuevo impuesto, ayudada por las Administraciones de Contribuciones Directas de cada provincia, si bien, el organismo más duradero va a ser la Dirección General de Contribuciones y las Administraciones de Contribuciones provinciales, respectivamente.
Las Administraciones elaboraban unos índices y registros de todas las Grandezas y Títulos existentes en cada provincia, las cuentas del pago del impuesto, ingresándolo en las oficinas de las Tesorerías-Contadurías provinciales, que, mediante certificaciones, acreditaban dicho pago y las mandaban a la Dirección General mencionada, donde constaban los índices y registros generales de todas las Grandezas y Títulos de España.
Acreditado el pago del impuesto establecido, certificado por la Dirección General, se hacían efectivos los derechos de los titulares de las Grandezas y Títulos.
El Ministerio de Gracia y Justicia, por su parte, seguía expidiendo las cartas de confirmación en las sucesiones y los Reales Despachos en las nuevas creaciones que, la Dirección General de Contribuciones se encargaba de trasladar a las correspondientes Administraciones provinciales.
Toda esta tramitación se refleja en la documentación, cuyo período histórico se remonta al año 1631 y finaliza en 1929, aunque la mayor parte corresponde a los expedientes tramitados durante el siglo XIX.
Durante todo este período permanece vigente el impuesto, a excepción de la breve supresión de 1873, consecuencia de la Ley de Presupuestos de 6 de agosto restableciéndose, un año después, en virtud del Decreto-Ley de Presupuestos de 26 de junio de 1874.