Historia Archivística:
Este fondo llegó al Archivo Histórico Nacional junto con la documentación del Consejo de Castilla. Es de suponer que, dado que los ministerios establecidos por José I absorbieron - entre 1809 y 1814, en la zona dominada por su gobierno - la potestad administrativa y política que detentaba hasta entonces el Consejo de Castilla, al desaparecer en 1814 los ministerios y ser el Consejo de Castilla restablecido por Fernando VII en 1814, la documentación generada por los ministerios josefistas volvieran a dicho consejo, y fuera esta la razón de estar instalados en la misma sede.
Actualmente este fondo se custodia en la sección de Consejos del archivo.
Historia Institucional / Reseña Biográfica:
La aportación más trascendental desde el punto de vista institucional de la ocupación francesa en España entre 1808 y 1814 es la implantación de la estructura ministerial, que sentará las bases para la progresiva desaparición del complejo sistema polisinodial de los consejos. El propio José I firmó en enero de 1809 desde Burgos el decreto de supresión del Consejo de Castilla, que sería restablecido en 1814 tras la vuelta de Fernando VII. La Constitución de Bayona de julio de 1808 ya contemplaba la creación de los ministerios de Negocios Extranjeros, Justicia, Negocios Eclesiásticos, Hacienda, Guerra, Marina, Indias, Interior y Policía General. Pero no será hasta el 7 de febrero de 1809, después de la segunda entrada en Madrid de José Bonaparte, cuando este firmaría el Real Decreto sobre organización y atribuciones de los Ministerios.
Según el Real Decreto de 6 de febrero de 1809 sobre organización de los ministerios josefinos, correspondía al de Hacienda las siguientes atribuciones: la correspondencia, fijación, repartimiento y cobranza de las contribuciones de toda especie; la administración de todas las cajas públicas; la de las rentas reales, Lotería, bienes patrimoniales o incorporados a la Corona, Aduanas, Correos, sal, tabaco, plomo y demás estancos y las Casas de la Moneda; el pago de la deuda pública o inspección de la Caja de Consolidación; el abono de las pensiones civiles y eclesiásticas; el pago de los sueldos de aquellos cuerpos que no estuviesen dotados con fincas; la dirección del Tesoro Público; la autorización del pago de los libramientos que cada ministerio expida sobre la Tesorería en virtud de Presupuestos y de los abonos que les están mandados a efectuar; la propuesta para agentes del Tesoro Público; las diligencias para cobrar los fondos que pertenecen a dicho Tesoro.
La documentación generada por el Ministerio de Hacienda de José I conservada en el Archivo Histórico Nacional corresponde casi en su totalidad a una de sus direcciones generales, la Comisaría General de Cruzada. Aunque pudiera parecer que este organismo debía haber girado en torno al Ministerio de Negocios Eclesiásticos, de reciente creación, lo cierto es que se adscribió al Ministerio de Hacienda desde los primeros años del reinado de José I, y del departamento hacendístico dependerían también todos los colectores del subsidio y subdelegados de la cruzada, así como sus administradores y tesoreros provinciales.
Regentada por Juan Antonio Llorente -que además era Consejero de Estado-, la Comisaría general de Cruzada era un organismo de bastante complejidad. Su misión principal era la de administrar la regalía de bulas, que se apropiara la monarquía de José Bonaparte.