Alcance y Contenido:

Ángel Valarino, vecino y del Comercio de la ciudad de Cartagena, dice que para conservar sus derechos y los de su hijo Juan a los bienes que posee en el Genovesado de donde es natural, tuvo que inscribirse en la matrícula francesa en 1807, que esto se miró como un delito en la revolución y, sin embargo de los auxilios que había facilitado para sostener la justa causa se le confiscaron sus bienes y redujo a tal estado que creyó necesario pasar a Marsella, para recoger algunos intereses y socorrer a su familia; pero que, pasando para Valencia y presentado con su hijo al Mariscal Suchet, fue comprometido por este el citado Juan para servir las Comisión de Policía del Cuartel General, como lo hizo, dispensando muchos beneficios a los españoles; que en la retirada del ejército enemigo siguió aquel a Francia estableciéndose en Marsella en donde ha obtenido la decoración de Lis por premio de adhesión a la casa reinante, y, por lo que resulta de los documentos que acompaña, solicita que se le conceda a su citado hijo Juan Valarino permiso para entrar en España y que, si no hubiese lugar para ello por ahora, se manden pasar estos antecedentes al Consejo de Castilla o a cualquiera otro para que, con citación y precisa intervención fiscal, sustancie su purificación.