Tratado de alianza entre el rey Felipe IV y el emperador Fernando II contra el rey de Suecia y sus aliados.
1632-02-14
Subserie
Archivo Histórico Nacional 1. INSTITUCIONES DEL ANTIGUO RÉGIMEN 1.1. INSTITUCIONES DE LA MONARQUÍA Consejo de Estado Tratados internacionales Tratados internacionales suscritos por España.
Consejo de Estado (España. 1521-1834)
Confederación de los reyes, príncipes y repúblicas de la cristiandad para la defensa del Imperio.
Los ministros plenipotenciarios españoles nombrados a tal efecto por Felipe IV fueron Lope Díaz de Aux, marqués de Cadereita, y Jacobo Bruneau.
Los confederados se obligaban a expulsar al rey Gustavo II Adolfo de Suecia de todos los territorios del Imperio, a que dispusieran las armas los que se habían opuesto al Emperador, y se recuperasen los territorios sometidos por la fuerza. Respecto a Italia, la paz concluida en Ratisbona con el Rey de Francia establecía que se conservarían los derechos de todos los príncipes de Italia feudatarios del Imperio, igual que los de los príncipes alemanes fieles al Emperador. Este sería cabeza de la liga, asentada por seis años, de la cual formaba parte preferente el rey Felipe IV de España. El jefe supremo del ejército en Alemania sería el Emperador, pero si la guerra tuviera lugar en España o en otros territorios, tomaría el mando el príncipe respectivo. La liga duraría seis años, prorrogables por acuerdo de las partes, y si antes de este plazo concluyera la guerra se licenciarían los ejércitos, permaneciendo la liga en vigor. Las disensiones entre los confederados serían solventadas por el Emperador; si alguno se uniera a los estados de Holanda sería considerado enemigo. Se invitaba a entrar en esta liga a todos los reyes y príncipes cristianos que manifestaran su adhesión. La capitulación firmada y sellada por el Emperador tenía que ser ratificada por Felipe IV y por cada uno de los confederados.
Para la defensa del Sacro Romano Imperio se unían los príncipes y demás electores con el Emperador y el Rey de España para recuperar los territorios ocupados. Esta federación duraría tres años, de 1635 a 1637, y tendría un ejército de treinta mil infantes y diez mil caballeros, debiendo el Emperador alistar la tercera parte de dichas fuerzas. El jefe del ejército en Alemania sería el Emperador, pero si la guerra se desarrollaba fuera del Imperio sería Felipe IV el que ostentase el mando. Cada uno de los coligados recibiría, en caso de guerra, una ayuda en hombres y bagajes doble de la que ellos aportasen, excepto en el caso de Felipe IV, en que la ayuda sería igual a su contribución. Las diferencias entre componentes de la liga serían solventadas por el Emperador.
Serían invitados a participar en ella el Papa y todos los reyes, príncipes y repúblicas cristianas. Tiene la firma y sello del Emperador y por parte de Felipe IV firma su plenipotenciario Ignacio Vélez de Guevara, conde de Oñate, hasta su ratificación por el rey.