Isabel I dispone que se declare la guerra por Guipúzcoa, para impedir que puedan reclutar a la gente de Gascuña para su armada, ante los rumores de que los franceses preparan una armada para interceptar el convoy que llevaba a la archiduquesa [Juana]. Encarga la reina a Diego [López de Ayala] que informe sobre el número de soldados que debe mandar y si necesita infantes o ginetes.
Archivo Histórico de la Nobleza, FRIAS,C.18,D.67
