Conjunto instrumental creado en Sevilla el 10 de octubre de 1923.

Fue fundada por Manuel de Falla, su principal impulsor, con el violonchelista Segismundo Romero y Eduardo Torres, maestro de capilla de la catedral de Sevilla. En sus inicios fue dirigida por Ernesto Halffter, discípulo de Falla, con Torres como asistente de dirección.

Después del estreno, en versión de concierto, de El retablo de maese Pedro, dirigido por el propio Falla, el día 23 de marzo de 1923 en el teatro San Fernando de Sevilla, se pensó en la creación de un conjunto instrumental que pudiese interpretar repertorio contemporáneo y de los periodos barroco y clásico.

El concierto de presentación de la Orquesta Bética de Cámara tuvo lugar el 11 de junio de 1924, en el Teatro Lloréns de Sevilla, con el siguiente programa: Fanfare de Falla; Sinfonía en Mi bemol mayor de Joseph Haydn; Trois pièces de Domenico Scarlatti, orquestadas por Roland-Manuel; Dos preludios de Adolfo Salazar; Berceuse de Rodolfo Halffter; El amor brujo de Falla, en versión de suite para orquesta de cámara; Marcha grotesca de Ernesto Halffter; Suite Pulcinella de Igor Stravinski; y Kamarimskaia de Mikhail Ivanovich Glinka.

Durante su primera etapa, hasta la guerra civil española, realizó algunas giras por varias ciudades españolas, en cuyos conciertos solía ofrecer música española. En diciembre de 1924 estrenó en Alicante el poema sinfónico Don Quijote velando las armas del compositor alicantino Óscar Esplá. El 30 de enero de 1925 interpretó en Sevilla, en versión escénica con marionetas, El retablo de maese Pedro, en el mismo teatro donde había sido estrenado dos años antes.

En los actos de clausura de la Exposición Ibero-Americana de Sevilla, dio dos conciertos en junio de 1930. Ese mismo año la Casa Regal publicó los registros de El amor brujo y Noches en los jardines de España en dos álbumes de cuatro y tres discos, respectivamente. En estas grabaciones, junto a la OBC, dirigida por Ernesto Halffter, figuran como solistas la contralto Conchita Velázquez y el pianista Manuel Navarro.

Entre los años 1931 y 1934 fue presidente de la formación Alberto Fernández Ballesteros, concejal del Ayuntamiento de Sevilla y miembro del grupo literario Mediodía que publicaba una revista con el mismo nombre. En esta etapa el compositor Federico Elizalde compartió la dirección de la orquesta con Halffter y presentó alguna obra propia como Música para quince solistas.

El 31 de octubre de 1932 los miembros de Mediodía organizaron un concierto memorable en el sevillano Teatro Coliseo España. Con Elizalde al frente, la Bética interpretó Sinfonietta de Halffter; la música del ballet La création du monde de Darius Milhaud; La pájara pinta de Elizarde, con Rafael Alberti recitando el texto y un decorado del pintor sevillano Pablo Sebastián; Histoire du soldat de Igor Stravisnki, con una versión en castellano del texto de Charles Ferdinand Ramuz de Alberti y leída por él; más dos obras de Falla: Concerto y una versión de la suite de El sombrero de tres picos.

Por iniciativa de Fernández Ballesteros, se proyectó ese año un homenaje a la Bética, organizado por el ayuntamiento hispalense. El acto consistiría en una nueva producción de El retablo de maese Pedro, en versión teatralizada, con diseño de escenografía y marionetas de Pablo Sebastián, que en aquel momento residía en París. Finalmente, este proyecto, que había sido aplazado, se llevó a cabo en el Teatro San Fernando de Sevilla, el 7 de mayo de 1935.

En junio de 1933 participó, dirigida por Ernesto Halffter, en la producción de El amor brujo que la compañía de Encarnación López La Argentinita presentó en el Gran Teatro de Cádiz, en homenaje a Falla y, a los pocos días, en el Teatro Español de Madrid, con decorados de Manuel Fontanals. Después de estas funciones, en esta misma sala madrileña, ofreció dos conciertos: uno popular organizado por la Asociación de Arte y Cultura Proletaria con obras de Wolfgang Amadeus Mozart, Ludwig van Beethoven, Halffter y Falla, entre otros, seguido por una charla de la escritora María Teresa León; y otro a beneficio de los Comedores de Asistencia Social, con la participación de La Argentinita. Tras una gira por el norte de España, reapareció la compañía de esta bailarina con la Bética en octubre, ahora dirigida por Rodolfo Halffter en el mismo teatro; en noviembre actuaron en el Ateneo de Madrid. Junto con la bailarina Laura de Santelmo participó en la "Gala de danzas y música española" en el Teatro San Fernando de Sevilla, en enero de 1935.

Durante la guerra civil, en la Sevilla dominada por el bando fascista, tocó en enero de 1937 en las funciones de entremeses de Cervantes y Lope de Vega que el grupo de teatro falangista La Tarumba, dirigido por Luis Escobar, representó en el teatro San Fernando. En 1938, bajo la dirección del pianista José Cubiles, que interpretó en Sevilla, Córdoba y Málaga Noches en los jardines de España, realizó una gira por varias ciudades del norte de España. El 11 de diciembre de 1939 ofreció un concierto, dirigido por Jesús Arambarri, con la pianista Pilar Bayona en el que interpretaron, entre otras obras, Noches... de Falla y Homenaje a la Tempranica de Joaquín Rodrigo.

Entre abril y mayo de 1940, en una gira por el norte de África, actuó en Ceuta, Tánger y Tetuán, dirigida por el pianista Manuel Navarro. En junio y julio de ese mismo año participó en las representaciones del auto sacramental de Calderón de la Barca, El gran teatro del mundo, que hizo el grupo de teatro del SEU de Sevilla en el Parque de María Luisa.

En esta etapa colaboraron con la OBC algunos músicos locales, como el violinista Luis Lerate, bajo la dirección de Manuel Navarro. También foráneos, como los pianistas Pedro Lerma, Luis Galve, Pilar Bayona, Teresa Alonso Parada y Leopoldo Querol; los violinistas Enrique Iniesta y Rosa Garcia-Faria; los guitarristas Regino Sainz de la Maza y Celedonio Romero; y los directores Enrique Jordá, Cubiles y Napoleone Annovazzi. Estrenó el 31 de octubre de 1943 Obertura para una ópera de cámara de Telmo Vela, catedrático del conservatorio sevillano. Participó en algunas representaciones de ópera italiana que tuvieron lugar en el Teatro San Fernando, para las que hubo que recurrir a la contratación músicos ajenos a la orquesta. El 9 de enero de 1947 tocó en la velada necrológica que se celebró en el Gran Teatro Falla de Cádiz, con motivo de la llegada de los restos mortales del compositor gaditano.

Posteriormente, tuvo una andadura desigual. El Patronato Joaquín Turina asumió la tutela de la Bética en 1964. Esto supuso el origen de la Orquesta Filarmónica de Sevilla, que en 1976 pasó a denominarse Orquesta Bética Filarmónica de Sevilla.

El archivo de la Orquesta Bética de Cámara, junto con los de las entidades sinfónicas que la sucedieron, se encuentra depositado en el Archivo General de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla.