Institución
Isora (barco de vapor)Otras formas
desconocida
El armador tinerfeño José Peña Hernández cedió este vapor a las tropas franquistas para su uso como barco prisión durante la Guerra Civil Española. Este barco junto con el vapor Gomera, el Santa de Rosa de Lima y Santa Elena Mártir estaban unidos por pasarelas, formando la prisión flotante de Santa Cruz de Tenerife conocida como el "archipiélago flotante".
En 1937 los vapores Santa Ana Mártir e Isora, propiedad de Álvaro Rodríguez López y José Peña Hernández respectivamente se incorporan como barcos prisión. A finales de 1937 se les une un gran pontón llamado Porto Pí, traído del Puerto de La Luz de Las Palmas.
En 1938 Álvaro Rodríguez López, el naviero canario más importante del siglo XX, compró los vapores Isora y Adeje al armador Peña Hernández. Funcionaron como prisiones flotantes hasta 1939, año en el que finaliza la contienda.
Fecha del evento: 1936 - 1939