Persona
Álvarez, Lilí (1905-1998)Otras formas
Roma (Lacio, Italia) 1905-05-09 - Madrid (España) 1998-07-08
Elia María González Álvarez, más conocida como Lilí Álvarez, fue una deportista, periodista y escritora española.
Nació en Roma en el seno de una familia de empresarios, burgueses, políticos y aristócratas españoles. Durante su infancia y juventud, los constantes traslados de la familia entre distintos países de Europa y su contacto con la naturaleza y el ejercicio físico, principalmente en los Alpes, definieron su interés por el deporte. Después de una exitosa incursión en el patinaje sobre hielo, Lilí Álvarez empezó a jugar al tenis en 1917, ganando su primer torneo en Suiza dos años después. Desde 1923 estuvo en contacto con el foco tenístico más importante de la época, la Riviera francesa, debido a que su familia empezó a veranear allí. En 1924, en los Juegos Olímpicos de París, se convirtió, junta a Rosa Torras, en la primera mujer en representar a España en unas olimpiadas.
A partir de 1926 se trasladó a Inglaterra donde conseguió ganar a la campeona americana Miss Malory y prepararse para el torneo de Wimbledon, competición en la que debutaría ese mismo año y que le proporcionaría fama internacional. Fue finalista en dicho torneo en los años 1926, 1927 y 1928, alcanzando el segundo puesto del ranking mundial. En 1929, junto a la campeona holandesa Miss Boumann, sería campeona de dobles del torneo de Roland Garros en París, y en 1930 ganaría el Torneo de Roma, título que no volvería a ganar una tenista española hasta 1993. Ese mismo año, y ligado a su pasión por la naturaleza, el esquí y el montañismo, tuvo la oportunidad de participar en una película documental llamada "Der todesweg aul die Bernina", que tenía como contexto la escalada al Piz Palü, en la Bernina Suiza. Tras ganar dos títulos de tenis más en una gira por Sudamérica, los de Río de Janeiro y Buenos Aires, se retiró temporalmente en 1932.
Después de la Guerra Civil Española se instaló definitivamente en Madrid. Ganó el Campeonato de España de Tenis en San Sebastián en 1940 y se retiró definitivamente. El añó siguiente participó en los Campeonatos Nacionales de esquí en Candanchú y venció en las categorías de absoluto, descenso y eslalon.
Su desempeño y éxitos en estos deportes y su interés por muchos otros, en un contexto en el que la mujer estaba alejada de su práctica, hacen que sea considerada una pionera del deporte femenino en España. Pero además, Lilí Álvarez desarrolló también una intensa carrera como periodista, escritora y conferenciante en la que reflejó estos intereses y sus inquietudes en torno a temas como la mujer, el deporte y la religión. Publicó artículos en diarios como el argentino La Nación y el inglés Daily Mail, o en España en el ABC, en las revistas Blanco y Negro, Cuadernos para el Diálogo o El Ciervo. De este modo, se convertiría en una de las primeras mujeres en cubrir noticias deportivas, aunque sus artículos y reportajes trataron una gran variedad de temas y acontecimientos, como el devenir de la Segunda República o de la Guerra Civil.
Paralelamente a su labor periodística y deportiva se fue formando una obra como escritora en la que profundizó en esos temas, principalmente centrados en la circunstancias de la situación española. En una primera etapa sus escritos estuvieron marcados por la práctica deportiva y la juventud, con la obra "The Modern Lawn Tennis" como máximo exponente. Después, en un contexto más duro, el de la España de los años cuarenta, y de más madurez, generó escritos con una mayor profundidad, reflexión, análisis y crítica de la situación sociopolítica del país, centrándose principalmente en la mujer y criticando su situación en la sociedad del momento. De este periodo destacan obras como "Habla la mujer" o "El mito del amateurismo deportivo". Finalmente, en 1977 publicaría su obra más importante, "En tierra extraña", en la que el aspecto religioso aparece con mucha fuerza.
Los reconocimientos y homenajes han sido una constante desde la década de los cincuenta del siglo XX, tanto en el ámbito nacional como internacional. En Inglaterra ha pasado a formar parte de su imaginario deportivo y popular, recordada con el apodo "The Senorita", fue nombrada miembro honorífico del prestigioso The All England Lawn Tennis and Croquet Club en 1968 y dos de sus retratos se encuentran en la National Portrait Gallery de Londres. En España, en 1976 el Ministerio de Justicia le otorgó la Cruz Distinguida de 1ª Clase de la Orden de la Cruz de San Raimundo de Peñafort y en 1998 el Consejo Superior de Deportes le concedió la Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo.