Institución
Ducado de Béjar
1485
El Estado de Bejar pertenece a la familia Zúñiga, o López Zúñiga, linaje que tiene su origen en la villa y lugar de este nombre en Navarra y que pasará a Castilla en 1274 con Iñigo Ortiz Stúñiga. Posteriormente, Diego López Zúñiga, Justicia Mayor de Castilla instituye en sus dos testamentos de 1399 y 1417 siete mayorazgos para cada uno de sus hijos con las villas de Bañares (concedida en 1379 por Juan I de Castilla siendo infante), Capilla (adquirida por compra en 1382) y Burguillos (adquirida por compra en 1394).
El Señorío de Bejar lo obtendrá mediante permuta en 1396 con el de Frías, que había sido una merced de Enrique III en 1394. El título de Duque de Bejar lo otorgan los Reyes Católicos a D. Alvaro de Zúñiga y Guzmán, I Duque de Arévalo y Plasencia y I Conde de Bañares, al renunciar a la villa y título de Arévalo.
A través de varios enlaces matrimoniales se incorporan a la casa tres nuevos estados señoriales: el Marquesado de Gibraleón, el Condado de Belalcazar y el Ducado de Mandas y Villanueva y Marquesado de Terranova.