Geógrafa, arqueóloga, historiadora y profesora española, exiliada en México tras la Guerra Civil española.

Hija de José Oliva Vilanova y de Francisca Teixell Marcó. Se casó con Antonio Coll Maroto, militante del PSOE y oficial de la secretaría del Tribunal de Espionaje y Alta Traición de Cataluña durante la contienda, y fueron padres de María Francisca Atlántida, geógrafa y profesora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

En 1933 se licenció en Geografía e Historia por la Universidad de Zaragoza y ejerció como profesora de geografía en los institutos de bachillerato de la Seo de Urgel (Lérida) y Barcelona.

En 1939, con la entrada de las tropas franquistas en Cataluña, marchó junto con su marido a Francia y llegaron hasta París, ciudad en la que permanecieron hasta la ocupación nazi. Posteriormente huyeron a Marsella y embarcaron el 15 de enero de 1941 en el buque Alsina, vapor en el que viajaba el presidente de la II República Niceto Alcalá Zamora, con dirección a la isla Martinica. Desde allí su objetivo era llegar a Río de Janeiro pero el gobierno francés de Vichy, denegó al buque el certificado para cruzar el Atlántico y tuvieron que permanecer 6 meses en Dakar. Debido a su avanzado estado de gestación, el 28 de mayo de 1941 nació su hija Atlántida. A finales de julio, el buque Alsina desembarcó en Casablanca (Marruecos), y tres meses más tarde consiguieron partir hacia México, vía Nueva York, a bordo del buque Monterrey, llegando a Veracruz el 15 de octubre de 1941.

A su llegada a México, en la ficha del registro de extranjeros (RIEM) indicó como persona de referencia a Indalecio Prieto. En el exilio la familia recibió las ayudas de la Junta de Auxilio a los Republicanos Españoles (JARE).

Profesionalmente, ingresó en la plantilla del Instituto Luis Vives de Ciudad de México, como profesora de geografía y a partir de los años 50, impartió clases en la Academia Hispano Mexicana y en la Escuela Nacional Preparatoria. Posteriormente obtuvo la nacionalidad mexicana.

En 1945 su interés por la arqueología mexicana le llevó a ingresar como alumna en la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), donde conoció a la antropóloga francesa, Laurette Sejourné. Surgió una amistad y una colaboración profesional (realizó las traducciones de algunos libros de Sejourné) que culminó con la publicación de dos libros: "Terra Ignota: la Geografía de América Latina a Través de Cronistas de los siglos XVI y XVII" (1986) y "La resistencia indígena ante la conquista" (1991).

En 1966 regresó a Reus para visitar a su hija y contactó con Salvador Vilaseca, prehistoriador de reconocido prestigio y antiguo colaborador de Bosch Gimpera, surgiendo una gran amistad. En el Museo de Reus se conservan siete cartas enviadas por Oliva a Vilaseca y a su mujer desde América, escritas entre diciembre de 1967 y diciembre de 1973.

Colaboró en diversas publicaciones con Marcel Santaló como la edición de libros pedagógicos: "Nociones de geografía física" (1958), «Geografía física y humana» (1965) y «El universo y sus misterios: Introducción a la astronomía» (1988, firmado solo por ella).

Asimismo en 1983, participó en la preparación de la exposición "El exilio español en México", organizada en Madrid por el Ministerio de Cultura de España y por diversas instituciones mexicanas y de exiliados españoles. Su actividad profesional terminó en 1987. Falleció en Ciudad de México a los 95 años en el año 2007.

En 1936 acudió como doctoranda al Archivo Histórico Nacional (AHN) de Madrid para investigar sobre Paleografía y Diplomática en la época de los Condes Catalanes.