Persona
Felipe IV (1268-1314, rey de Francia)Otras formas
1268 - 1314-11-29
Rey de Francia y rey de Navarra por su matrimonio con Juana de Navarra, heredera de Enrique I de Navarra. Era hijo de Felipe III de Francia e Isabel de Aragón y en 1284 contrajo matrimonio con Juana de Navarra. Con ella tuvo tres hijos varones que llegaron a la edad adulta: Luis X, y heredero de los reinos de Francia y Navarra; Felipe, conde de Poitiers y Carlos, conde de la Marche. Convertido en rey de Francia a la muerte de su padre, acaecida en 1285, también administró de manera efectiva el reino navarro, mientras que su mujer Juana conservaba su capacidad para administrar los dominios de Champaña que había heredado igualmente de su padre. Durante su reinado, y a pesar de no ejercer una residencia permanente en el mismo, se fueron consolidando algunas instituciones fundamentales del Reino de Navarra que, además, se establecieron de manera más permanente en la capital del mismo. Hubo una especialización de la curia regia y las actuaciones judiciales quedaron encomendadas a una comisión que acabó transmutada en un parlamento, regulado por una ordenanza de 1303. En relación a las instituciones financieras, a la Cámara de los dineros se unió una nueva Cámara de los "comptos" que ganaría en importancia en los años posteriores. Para hacer un control efectivo del territorio se mantuvo la figura del gobernador, como delegado del poder real y máxima autoridad en su circunscripción; no obstante, estos cargos, al igual que ocurrió con otros, como los merinos, los responsables de la Tesorería o los bailíos fueron ocupados por personas ajenas al reino de Navarra. Importantes fueron también sus acciones en materia monetaria y de control de la Iglesia navarra.
A la muerte su mujer, Juana I, el monarca no traspasó a su hijo y heredero, Luis, la potestad gubernativa y fue necesaria la intervención de los navarros para determinar si era necesaria la extensión de esta tutela paterna.