Clérigo, abogado, político, diputado y diplomático mexicano.

Estudió en los seminarios de Monterrey y Guadalajara, obteniendo el título de bachiller en Filosofía, Cánones y Leyes. En 1803 se ordenó sacerdote. En Monterrey ejerció como profesor de derecho, capellán y sinodal del obispado. En 1810 fue aceptado en el Colegio de Abogados de México.

En ese mismo año fue elegido diputado para las Cortes Generales y Extraordinarias por el Ayuntamiento de Saltillo. Llegó a Cádiz el 28 de febrero de 1811 y se incorporó a las Cortes gaditanas el 21 de marzo. Fue miembro de las Comisiones de Justicia, de Biblioteca de las Cortes, de Honor, y de Hacienda. Formó parte de la "corriente americanista" de las Cortes, y destacó por sus intervenciones en los debates sobre Inquisición, libertad de imprenta y discusión del proyecto constitucional. Defendió la autonomía de las Provincias Internas de Nueva España y el derecho de los miembros de las castas a tener representación política. Fue diputado suplente por Nueva España en las Cortes Ordinarias de 1813.

Durante la restauración fernandina (1814-1820) fue perseguido y encarcelado en la cartuja de Ara Christi (El Puig, Valencia). Con el Trienio Liberal (1820-1823), fue reelegido diputado por Coahuila para las Cortes de 1820, siendo miembro de las Comisiones de Examen de poderes, de Etiqueta para recibir a la reina y los infantes en la apertura de sesiones, de Examen de cuentas y asuntos de las Diputaciones, de milicias de América, de mejora de cárceles, eclesiástica, de reforma del Reglamento, de propuesta de consejeros de Estado y de Ultramar. Formó parte de dos grupos de diputados que elaboraron sendas propuestas para dividir los territorios hispanos de Ultramar en tres reinos vinculados a España.

Tras su regreso a México fue elegido diputado para el Congreso mexicano, en el que defendió el sistema federal y participó en la elaboración de la Constitución de 1824. Formó parte del primer ejecutivo republicano presidido por Guadalupe Victoria, en calidad de Ministro de Justicia y Negocios Eclesiásticos, entre 1825 y 1828.

En 1831 fue nombrado embajador para la negociación y firma del tratado de amistad, comercio y navegación con Chile. En 1833 volvió a ocupar el Ministerio de Justicia en el ejecutivo reformista de Antonio López de Santa Anna, del que salió al año siguiente. A partir de entonces se apartó de la política y se centró en el desempeño de cargos eclesiásticos, integrándose en el cabildo de la catedral de Puebla como chantre. En 1841 fue elegido para la Junta de Representantes encargada de elegir un presidente provisional. En 1842 fue elegido diputado para el nuevo Congreso, al que no se presentó.