Militar y gobernante español.

Nombrado subteniente del Cuerpo de Francos el 7 de febrero de 1836. En enero de 1842 fue ascendido a capitán, y destinado a Cuba durante seis años. En 1863 alcanzó el rango de general y al siguiente año y fue designado subsecretario del Ministerio de la Guerra. En febrero de 1871 fue elevado a la categoría de teniente general, y ese mismo año sería elegido como senador de Huesca.

En 1873, Emilio Castelar, le confió el mando supremo de Cuba. Al año siguiente está de regreso en la península y tras el pronunciamiento de Martínez Campos en Sagunto recibe el despacho de la Guerra. En septiembre de 1875 asumiría la responsabilidad de la dirección del gabinete formado tras la dimisión de Cánovas. Resuelta la crisis, Jovellar sería nombrado capitán general de Cuba en 1875. Retornado a la Península en junio de 1878, un mes más tarde sería nombrado capitán general. En febrero de 1881 fue designado para la presidencia de la Junta Consultiva de Guerra, que desempeñaría hasta que en enero de 1883 se le encomendara la Capitanía General de Filipinas, cargo que ostentó dos años. Al constituirse, a raíz de la muerte de Alfonso XII, el primer gabinete de Sagasta, Jovellar recibió la cartera de la Guerra (1886) trabajando en ella hasta el 11 de octubre del siguiente año. Justamente. Desde marzo de 1887, hasta su muerte un lustro después, simultaneó los trabajos inherentes a dicho organismo con el de senador como miembro vitalicio conforme al deseo y designación de Cánovas.

Fue condecorado, entre otras, con la Gran Cruz de Quinta Clase Laureada de San Fernando Pensionada, la Cruz de San Fernando de Primera Clase (dos veces) y el Collar de la Insigne Orden de la Torre y Espada de Portugal.