Escritor, maestro y periodista, exiliado español. A los nueve años se mudó a Madrid junto a su familia. Se licenció en Magisterio por la Escuela Normal Superior de la capital y posteriormente estudió en la Facultad de Filosofía y Letras. Trabajó como profesor y como colaborador en El liberal y en El Sol, además de dirigir la revista Visión. Con el estallido de la guerra civil gestionó y dirigió diversas Casas de Educación y la Institución Giner de los Ríos. Tras el fin del conflicto bélico se asentó en Francia por seis años, donde trabajó como empleado en un matadero pese a la parálisis de una pierna que sufría desde su infancia. Escribió de manera puntual en El Patriota del Sud-Oeste y tras el fin de la segunda guerra mundial ejerció como docente de lengua y literatura española en un Liceo de Bayona y realizó sus primeras obras en París. En 1952 estableció su residencia en Montevideo (Uruguay) junto a su mujer y dos hijos. En dicha ciudad trabajó para el Consejo de Enseñanza Primaria y Normal y obtuvo la cátedra de Literatura en el Liceo número 13 por méritos relevantes. También fue docente de literatura española e hispanoamericana en el Instituto Magisterial Superior, fue profesor honorario de Conferencias en el Instituto de Estudios Superiores y asesor cultural de la Intendencia de Montevideo. Escribió como colaborador en la revista Marcha en 1955, donde tenía una sección de sátira llamada "El poncho de Don Paco"; en la revista Mundo Uruguayo y en los periódicos de Montevideo El Día y El País y dirigió también la revista España en el Uruguay. Fue autor de una gran cantidad de novelas que trataban sobre la guerra civil y su experiencia personal. Algunas de ellas eran un híbrido de ficción, ensayo y autobiografía, como por ejemplo El proscrito, galardonada con el Premio Banco de la República en 1954.