La Comandancia General de Melilla es un órgano de la Fuerza Terrestre del Ejército de Tierra de España cuya finalidad más importante consiste en preparar organizaciones operativas con las unidades acuarteladas en la ciudad de Melilla, de acuerdo con la doctrina específica terrestre.

Es una de las Unidades militares españolas de más larga tradición histórica, contando entre sus filas con la unidad más antigua del Ejército de Tierra, la Compañía de Mar de Melilla, actualmente encuadrada en la Unidad Logística (ULOG) Nº 24, quienes con sus "Cuarenta Hombres de Mar", llegaran a Melilla al mando de D. Pedro de Estopiñán en 1497.

Creada como órgano de Mando, capaz de abarcar tanto a los efectivos de guarnición destinados en la Plaza, como a los expedicionarios enviados desde la Península con motivo de la campaña que se inició, en octubre de 1893, la Comandancia General ha variado sus efectivos en función de la situación político-militar de cada momento, pero siempre ha participado en los sucesos históricos que han acontecido en una zona de responsabilidad o en sus inmediaciones durante los casi cincuenta años que duró el Protectorado español en Marruecos.

Después de la breve campaña de 1893, fue en 1909 cuando tuvo que emplearse a fondo, bajo el mando del General Marina, para restablecer la situación bélica originada por las cábilas de los alrededores e imponer la autoridad del Sultán de Marruecos en virtud de los acuerdos firmados en la Conferencia de Algeciras de 1906. En 1911, una tercera campaña de un año de duración hace que el área de influencia de la Comandancia General abarque la zona occidental del macizo del Gurugú, y se extienda, después de finalizadas las operaciones y por medio de una acertada dirección política, hasta la orilla izquierda del Muluya, río que materializaba el límite fronterizo oriental del Protectorado español con el francés.

Tras la Primera Guerra Mundial, en 1920, se reanudan las operaciones militares de avance hacia el oeste, con el despliegue hasta la zona de Annual, a primeros de 1921. Los sucesos conocidos como la "Campaña de Annual", a mediados de julio de ese año, dieron paso a una respuesta instantánea que hizo recuperar los territorios perdidos ese mismo mes de octubre, para restablecer la situación y dar paso, en 1925, a la operación militar conocida como "Desembarco de Alhucemas", principio del fin de una guerra que acabó en el verano de 1927.