Conservadora, profesora e investigadora española. Nació el 8 de noviembre de 1895 en Villadiego (Burgos) y murió el 4 de julio de 1973 en Madrid. Hija de Felipe Fernández Roiz (secretario de ayuntamientos) y de Filomena Vega Gutiérrez(maestra). Tuvo solo un hermano, Candido.

En 1918 se licenció en Filosofía y Letras sección Historia, por la Universidad Central de Madrid. Fue maestra de escuelas hasta 1920 año en que ingresó en la Residencia de Señoritas para preparar las oposiciones al Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos. En 1922 aprobó la oposición y entró en el CFABA. Su primer destino fue la Biblioteca Nacional, donde estuvo en prácticas apenas 3 meses hasta que fue destinada al Archivo de Hacienda y Biblioteca de Logroño.

En 1923 se casó con José Ferrandis en Madrid. En 1924 consigue trasladarse a Madrid destinada al Archivo del Ministerio de Estado y en 1926 aparece prestando sus servicios en el Archivo General de la Deuda. En 1928 se trasladó al Museo Arqueológico Nacional, donde se hizo cargo de la Sección IV, de Antigüedades Americanas y del Extremo Oriente. En 1929 fue designada para realizar la supervisión de las tareas relacionadas con la exposición del Tesoro de los Quimbayas en el pabellón de Colombia de la Exposición Iberoamericana de Sevilla. Durante esta etapa publicó varios artículos sobre artes decorativas y dos monografías sobre colecciones americanas.

Fue socia del Lyceum Club femenino y del Ateneo de Madrid. Se relacionó con María de Maeztu, Victoria Kent, Isabel Oyarzábal y Margarita Nelken.

En estos años previos a la Guerra Civil viajó a Tierra Santa, Turquía, Alemania Italia, Inglaterra, Francia, Austria, Bélgica, Holanda, Egipto, Túnez, Marruecos, Suiza, Estados Unidos, etc. Estos viajes, en gran parte fueron de trabajo, para estudiar colecciones americanas y asiáticas. En 1932 viajo a Paris, gracias a una ayuda de la Dirección General de Bellas Artes. En 1933 participo como profesora en el Crucero por el Mediterráneo. En 1934 viajó a Nueva York, becada por la Junta para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas. En 1935 viajó a Rusia, y este viaje tuvo para ella algunas consecuencias tras su regreso a España y sobre todo a partir de 1939.

En 1936 al inicio de la Guerra Civil española se encontraba en Alemania, consiguió llegar a España, con ayuda del duque de Bailén, quien la introduce en España por Vera de Bidasoa a pesar de que de la frontera estaba cerrada. Una vez en España se dirigió a Valladolid, y se presentó a las autoridades de la Junta de Defensa Nacional de Burgos junto con su marido. Pasó la Guerra Civil destinada en el Museo Arqueológico de Valladolid. Tras la guerra sufrió un juicio sumarísimo (1939-1940), un proceso de depuración (1940-1941), y un juicio de responsabilidades políticas (1941-1945). Superó todos estos procesos sin sanciones y continuo con su trayectoria profesional asumiendo cargos de responsabilidad con algunos procesos aun no cerrados. En 1940 se reincorporó a su puesto en el Museo Arqueológico Nacional hasta que fue trasladada en al Museo Nacional de Artes Decorativas. En 1941 fue nombrada directora del Museo Nacional de Artes Decorativas y del recién creado Museo de América, cargos que siguió ejerciendo hasta su jubilación. Al frente del Museo Nacional de Artes Decorativas se centró en el incremento de colecciones, en las obras de ampliación el edificio y en la nueva instalación museográfica que se inauguró en 1950. En el Museo de América fue la responsable de los trabajos de instalación del Museo en su nueva y actual sede, inaugurada en 1965. Se jubilo en 1965, tras más de 43 años de servicio, y ceso en su cargo como directora del Museo Nacional de Artes Decorativas, pero se mantuvo en el cargo de directora del Museo de América hasta 1968.