Una comunidad de beatas frecuentemente adineradas y con una observancia relajada de la vida monacal, habitaba esta casa junto a la parroquia de San Román desde 1558 o 1559, incorporándose posteriormente a la Orden Jerónima hasta la segunda mitad del siglo XX, cuatro centurias después.

En su templo se veneraban las reliquias de los santos mártires muertos en África: Arcadio, Probo, Pascasio, Eutiquiano y Paulilo.

La capilla donde descansaban los restos amenazaba con hundirse en 1581, por lo que las monjas acudieron al prelado para que informara de la veneración que el relicario causaba. Este a su vez contactó con el cardenal Aguirre* que se encontraba en Roma, el cual respondió que la situación tenía difícil solución. Aun así, en 1640 (tras haber sido declarados patronos de la Villa en 1627) recibieron una nueva urna, labrada por Juan Francisco de la Válida, vecino de la villa y posteriormente aceptaron otra, donde aún se conservaban en 1889.

Estos restos se exhuman en 1581. En 1607 grandes personalidades de la villa pidieron al obispo de Sigüenza, Mateo de Burgos (1548-1611), permiso para depositarlos con el reconocimiento que debía mientras se construía una nueva capilla el cual se lo concedió. En 1629 solicitan de nuevo permiso a Pedro González de Mendoza (1570-1639), obispo y señor de Sigüenza, para removerlos y trasladarlos a otra parte.

Hay publicaciones que para salvar los decretos de desamortización se dedicaban entre 1851 y 1852 a la educación de pensionistas (e internas), y en 1853 a la beneficencia y la enseñanza.

En 1951 llegan/ fundan el monasterio de Nuestra Señora de los Ángeles, junto a algunas monjas jerónimas de Santa Paula (Sevilla), apoyándose en la donación de Ángeles (viuda de Cantisán) consiguieron alojamiento en Constantina (Sevilla), trasladándose recientemente al centro.

* El conocido cardenal riojano José Sáenz de Aguirre, por fechas es algo posterior (1630-1699). En el listado que he consultado de cardenales españoles, no figura otro Aguirre hasta el siglo XIX.

Algunos estudios de investigación sitúan la mezquita de Medina Salim (Medinaceli en época musulmana, por sus dos naves en planta separadas por columnas, y un techo tan bajo) en este edificio, otros juzgan que seguramente fuera una sinagoga (Por su orientación, localización tan cerca del barrio judío y algunos restos arquitectónicos).

Recientemente (2009) se abrió la urna de los santos mártires con motivo de la exposición "Las Edades del Hombre" (en Oña (Burgos), 2012) y encontraron entre otros restos, un báculo eclesiástico de época visigoda, clave para posteriores estudios de estos objetos.