Persona
Blancafort i de Rosselló, Manuel (1897 - 1987)
La Garriga (Barcelona, España) 1897-08-12 - 1987-01-08
Compositor y director de orquesta catalán. Inició su formación musical con su padre, Joan Baptista Blancafort, y con el maestro local Joan Alsius. Su padre, perteneciente a la alta burguesía y apasionado por la tecnología, combinó el negocio familiar del balneario Blancafort en La Garriga con la creación de una fábrica de rollos de pianola, La Solfa, donde Blancafort trabajó transcribiendo partituras para pianos mecánicos. Esta experiencia le permitió familiarizarse con repertorios musicales antiguos y modernos, desarrollando un dominio de las técnicas compositivas más vanguardistas.
Influenciado por las interpretaciones de Joaquín Malats y por su amistad con el compositor Frederic Mompou, Blancafort comenzó a componer música para piano siguiendo las tendencias antitrascendentalistas francesas, que rechazaban el romanticismo alemán de Beethoven y Wagner en favor de obras breves y temáticas cotidianas. Esta corriente buscaba destacar la belleza de las pequeñas cosas, alejándose del experimentalismo de la Segunda Escuela de Viena liderada por Arnold Schönberg, cuyas obras expresionistas, como Pierrot lunaire, Blancafort rechazaba por su enfoque en lo marginal y lo feo.
Blancafort mantuvo una estrecha amistad y correspondencia con Mompou, lo que refleja no solo sus opiniones sobre la música francesa y catalana, sino también una profunda conexión personal. Para compensar su falta de formación académica, estudió métodos de composición y orquestación de autores como Gevaert y Rimski-Korsakov, y se inspiró en compositores como Stravinsky y Satie. Sus primeras obras, como Record (1915) y Jocs i danses al camp (1915-1918), marcaron el inicio de su carrera compositiva. En 1926, el pianista Ricard Viñes estrenó en París El parc d'atraccions, una obra que le dio proyección internacional y que incluía la famosa Polka de l'equilibrista, posteriormente coreografiada como ballet.
Blancafort también exploró temas catalanes en obras como Matí de festa a Puiggraciós (1929), inspirada en la novela Solitud de Víctor Català, y El rapte de les sabines (1931), una obertura sinfónica para ballet. Aunque rechazaba géneros como la zarzuela, que consideraba frívolos, participó en el XIV Festival de la Sociedad Internacional de Música Contemporánea en 1936 con Sonatina antiga, consolidándose como parte del "Grup dels Vuit", un grupo de compositores catalanes.
Tras la Guerra Civil, Blancafort se trasladó a Barcelona, donde continuó su labor creativa mientras trabajaba en el sector de seguros y editorial. Su estilo se mantuvo dentro de los esquemas académicos, evitando la experimentación y destacando por su riqueza tonal, cromatismo y ritmo. Obras como el Concerto omaggio (1944) y el Concert ibèric (1946) reflejan su cercanía a las corrientes modernas, aunque siempre mantuvo una distancia de los movimientos renovadores posteriores. Blancafort recibió numerosos reconocimientos, como el Premio Nacional de Música y el primer premio del Ayuntamiento de Barcelona por su Simfonia en mi (1950). En sus últimos años, se centró en su trabajo y creación musical, alejándose de los círculos renovadores.
De su numerosa familia, destacan sus hijos Albert y Gabriel Blancafort. Albert fue un destacado compositor y director de coros, mientras que Gabriel se especializó en la construcción y restauración de órganos, introduciendo la estética neoclásica en este campo. El taller de organería de Gabriel en Collbató sigue activo bajo la dirección de su hijo Albert Blancafort Engelfried.
Murió en 1987, dejando un legado que combina innovación y tradición, y que lo sitúa como una figura clave de la composición académica del siglo XX en Cataluña.