Luis Antonio de Borbón Saboya (Versailles, 6 de Agosto de 1775 – Gorizia, Austria, 3 de junio de 1844). Duque de Angulema y conde de Marnes.

Fue el último Delfín de Francia entre 1824 y 1830, hijo primogénito de Carlos X (1757-1836) y de María Teresa de Saboya (1756 -1805). A su nacimiento, su tío el rey Luis XVI de Francia, le otorgó el título de duque de Angulema.

En 1789, debido a los acontecimientos revolucionarios, abandonó Francia con sus padres pasando gran parte de su vida en el exilio. Contrajo matrimonio con María Teresa de Francia (1778- 1851) pero no tuvieron hijos.

Regresó a Francia tras la caída del imperio de Napoleón y como consecuencia de ello, su tío Luis XVI (1755-1824) ascendió al trono.

Era primo del rey Fernando VII de España y en 1823 encabezó la expedición militar francesa denominada Los Cien Mil Hijos de San Luis, enviada a España para ayudar a Fernando VII a restablecer la monarquía absoluta.

El 16 de septiembre de 1824, al ascender su padre al trono francés como Carlos X, se convirtió en Delfín de Francia, y heredero de la corona. Sin embargo, el 30 de julio de 1830, en el ámbito de la Revolución de julio, el rey Carlos X fue depuesto.

El 2 de agosto de 1830, Carlos abdicó en favor de su nieto el duque de Burdeos, Enrique de Artois (1820-1883); minutos más tarde, Luis Antonio también renunció sus derechos en favor de dicho duque. Esto provocó la división en los monárquicos legitimistas, que consideraban dicha abdicación como nula (carlistas) y por tanto Carlos X continuaría siendo el rey legítimo; y los que la consideraban la abdicación como válida (enriquistas), y por tanto, su nieto Enrique, sería el rey legítimo de Francia.

La familia real hubo de marchar al exilio mientras que el duque de Orleans y Lugarteniente General del Reino fue elegido por las Cámaras y proclamado rey de los franceses como Luis Felipe I (1773 –1850).

Al morir su padre Carlos X en Praga en 1836, una parte de los legitimistas le consideraron como nuevo rey con el nombre de Luis XIX, por considerar inválidas las abdicaciones de 1830. A pesar de adoptar la jefatura de la Casa real y la titularidad de rey, se mantuvo apartado de la política y empleó el título de conde de Marnes.