Fundado por Joseph de Llerena e Isabel Ana Calderón con Real licencia fechada en 1597 y verificada en 1601, cuando religiosas del convento de La Laguna entraron en clausura el día 20 de enero.

Anteriormente y por causas desconocidas, les había sido negada la Licencia Real a los regidores Luís Benítez de Lugo y Francisco Xuárez de Lugo el 3 de diciembre de 1594.

Los descendientes de los mismos patronos costearon la iglesia y la capilla mayor.

Para cuando llegó la desamortización (1836), este convento ya presentaba una situación de ruina y endeudamiento, además de una escasez de religiosas pero las autoridades permitieron a las monjas habitar el edificio hasta el 21 de octubre de 1868, cuando fue requerido para instalar edificios municipales – escuela, ayuntamiento y juzgados- debido a lo tentador de su localización. En noviembre fue demolido.