El convento de la Concepción de Tarazona, en la provincia de Zaragoza, fue edificado entre 1541 y 1546. Se trata del primer cenobio de época Moderna, en Tarazona, construido y promovido por las autoridades locales para acoger a las hijas de las familias nobles y burguesas de la localidad.

Se realizó durante el episcopado del cardenal Hércules Gonzaga (1536-1546), aunque sería su sucesor, Juan González de Munébrega (1547-1567), quien sufragó las edificaciones más importantes, en particular la iglesia, donde pensaba enterrarse.

También costeó el retablo titular, aunque este fue reemplazado en 1757 por, una efectista fábrica de escultura debida al zaragozano José Ramírez de Arellán.

La fundación del convento se realizaria con religiosas llegadas del convento de Jerusalén de Zaragoza, siendo la primera superiora Dña. María Coloma.

En algunas crónicas que dice, que en el S.XIX el numero establecido de religiosas para este convento era de 28 y qque una de sus funciones era la enseñanza.

Poco más conocemos del desarrollo de este cenobio, que fue desalojado por las últimas religiosas en 2001. Estas fueron acogidas por el convento burgalés de Peñaranda de Duero.

El convento constaba de un pequeño templo, al que se adherían las casas de las religiosas, estas organizadas en torno a un claustro de planta cuadrada. Llama la atención el pequeño campanario erigido en 1557, que se apoyó sobre uno de los cubos de la muralla medieval. Luce en los cuerpos altos decoración de tradición mudéjar que, junto con las citadas yeserías del coro, fueron declarados Bien Catalogado del Patrimonio Cultural Aragonés el 24 de octubre de 2002.

El huerto y las dependencias conventuales se enajenaron pasando a manos particulares, y la iglesia sigue perteneciendo al Obispado turiasonense.