Las Respuestas Generales originales, se realizan, esencialmente, entre 1750 y 1754. Se conservan con los otros documentos catastrales, en los Archivos Históricos Provinciales. En un primer momento se fueron depositando en la Contaduría Principal de la Capital de Provincia, que con el tiempo pasaría a ser la Delegación provincial de Hacienda. Las reformas provinciales cambiaron la dependencia de localidades; el aprecio que se tenía a esta documentación viene avalado por el cuidado que se puso en su conservación y en el traslado a la provincia correspondiente. Hay casos curiosos como Alcázar de San Juan, que tiene los libros repartidos entre la provincia antigua de Toledo y la nueva de Ciudad Real. O la Peñamellera (Panes, Abándames, Alles, Oceño etc.) que en 1750 estaba adscrita al corregimiento de Laredo como parte de la provincia de Burgos, y en 1834 pasa a Asturias; pero su documentación queda en Santander, y afortunadamente se conserva en el Archivo Histórico Provincial; ya que la Delegación de Hacienda de Oviedo se quema en 1934, y con ella la mayor parte del Catastro asturiano.
Copia compulsada del Archivo General de Simancas Cada Contaduría hace una copia compulsada de las respuestas generales de la provincia, que lleva la firma del Contador Mayor y el escribano correspondiente ("Es conforme al original que queda en la Contaduría de mi Cargo"). Otra diferencia es la simplificación a un mero esquema de mapas más detallados que pueden acompañar a la pregunta tercera en el original.
Las respuestas generales originales de la antigua provincia de Madrid, hechas entre 1750 y 1754, no se conservan. El contador de Madrid Martín de Abarrategui firma las copias compulsadas de las 97 localidades de la provincia el 10 de octubre de 1754, a los 5 años exactos del comienzo del Catastro, y las remite a principios de 1755 al Palacio del Buen Retiro, sede de la Junta de la Única Contribución, junto con los mapas o resúmenes provinciales. No incluye la Villa de Madrid: el casco de Madrid no se habría terminado, pero, en cambio, las respuestas generales del campo de Madrid, se habían hecho poco antes, aún en 1754; hay copia compulsada en 1757 en el Archivo Histórico Nacional, Ministerio de Hacienda libro 7463bis (entre los libros de Mapas o Estados Generales del Catastro); sus datos, sin embargo, no se reflejan en las estadísticas de la Provincia.
La Junta de la Única Contribución contó con la colección prácticamente completa, que se envía al Archivo de Simancas, a principios del siglo XIX, cuando se constata que la reforma fiscal no va a realizarse. Son los libros 1 a 672 de la 1ª remesa de la Dirección General de Rentas; al final de cada provincia están los 128 libros del Mayor Hacendado de cada localidad, que no presentamos en esta digitalización, porque tienen características muy diferentes.
Copia para la localidad En 1756 se ordena a las Contadurías Provinciales hacer una copia de los libros catastrales, entre ellos de las respuestas generales, para enviar a cada localidad catastrada, donde, en el futuro, servirían de guía para el reparto y cobro del impuesto. Se conserva en algunas localidades, como Granada; su apariencia es mucho menos cuidada, y llega a haber alguna hoja con sólo 6 ó 7 renglones.
© Ministerio de Cultura - Gobierno de España