Martín Sánchez Allú (Salamanca, 14 de septiembre de 1823 - Madrid, 31 de agosto de 1858). Miembro de la familia Sanchez-Allú, familia de compositores españoles compuesta por los hermanos Ricardo y Martín.

Compositor, pianista y profesor español. Inició su formación musical en el Colegio de Mozos de Coro de la catedral de Salamanca con el primer organista, Francisco de Olivares, quien también le daría clases en la Sección Filarmónica de la Escuela de Nobles y Bellas Artes de San Eloy. Mientras, cursaba estudios de gramática latina y filosofía en la universidad salmantina, aunque se centró en su carrera musical. En 1840 se trasladó a Madrid donde procuró darse a conocer como pianista y compositor. En la capital, formó parte del Liceo Artístico y Literario, escribió la ópera "Bianca di Messina", que no llegó a estrenar, y algunas piezas de música de salón. De vuelta a su ciudad natal, emprendió una gira de conciertos, como pianista, que le llevó a Valladolid, Santander, Burgos, San Sebastián y Vitoria. Entre 1842 y 1844 fue profesor y director de la Sección Filarmónica de la Escuela de San Eloy, donde había estudiado años antes. En 1845 regresó a Madrid, donde publicó varias obras para piano e inició otra gira de conciertos, actuando en Santander, Burgos y Valladolid. En esta última ciudad se asentó como maestro y director del Liceo Artístico y Literario, hasta 1848, y compuso su segunda ópera "Le donzelle eroiche" que tampoco se llegó a estrenar. Desde esa fecha se instaló en Madrid y comenzó a trabar amistad con otros pianistas compositores como Marcial de Adalid, Juan María Guelbenzu, Santiago Masarnau y Louis Moreau Gottschalk, también con el virtuoso violinista y compositor Jesús de Monasterio. Por su relación con Francisco Asenjo Barbieri, Joaquín Gaztambide y Rafael Hernando asistió al resurgimiento de la zarzuela decimonónica, género en el que también estrenó varios títulos; trazó una primera historia de la zarzuela en la publicación periódica "La Gaceta del Pasatiempo Musical", donde fue redactor de 1850 a 1852. Aunque aprobó la oposición, en 1854, para la plaza de organista en la catedral de Salamanca, desistió de la misma por la condición de tener que ordenarse. Sus conciertos en los salones de alta aristocracia y su trato con la familia real, probablemente, le procuraron que Isabel II le concediera la Cruz de Gracia de la Orden de San Juan de Jerusalén en 1857. A partir de este año y hasta su muerte, ejerció como profesor supernumerario de piano del Real Conservatorio de Música y Declamación de Madrid. Como compositor destaca su extensa producción para piano, con piezas propias del repertorio del momento como: "Fantasía dramática sobre motivos de 'Beatrice di Tenda' de Bellini" (dedicada "Al Exmo. Sr. Duque de Osuna y del Infantado", 1851), "El ciprés, invocación religiosa" (1852), "El deseo, nocturno" (1852), "Ecos de Granada" (1852), "Rondoleto para piano sobre dos canciones de la zarzuela 'El duende' de Rafael Hernando" (1852), "Fantasía sobre motivos de la zarzuela 'Jugar con fuego' del maestro Barbieri" (1853), "Sonata en Mi bemol mayor" (1853), "Tanda de valses sobre motivos de 'Luisa Miller' de Verdi" 1855), "El peregrino, invocación" (ca. 1857), "Capricho de salón sobre motivos de 'Macbeth' de Verdi" (publ. 1860), "La corona de diamantes, polka, compuesta sobre motivos de la zarzuela del Maestro Barbieri 'Los diamantes de la corona'" (publ. 1876). Para la escena, además de las dos óperas citadas, nunca estrenadas, escribió varias piezas breves, algunas en colaboración con otros autores, entre las que destacan "El bachiller sensible" (1853), "El tren de escala" (1854), "La cola del diablo" (col. Oudrid, 1854), "Pedro y Catalina" (1855) y "Las bodas de Juanita" (1855), su mayor éxito; también escribió zarzuela grande, en tres actos: "El esclavo" (col. Cepeda, 1856), "Fra Diávolo" (1857) y "La dama blanca" (1858, estr. póstumo). De sus ciclos de canciones destaca el álbum "La cuna real. Presentado a S. M. por la Excma. Sra. Marquesa de Povar, aya de S. A. R. la Princesa de Asturias" (1852-53). También fue autor de música sinfónica, religiosa y de cámara, como la "Sonata para violín y piano" (1854) dedicada a Jesús de Monasterio.