Oficina creada por una Orden de la Secretaría General del Jefe del Estado, Francisco Franco, de 20 de abril de 1937. Creado durante la guerra civil española, en plena ofensiva de Vizcaya, este nuevo organismo tenía como tarea recoger, analizar y clasificar el material de propaganda incautado al bando enemigo. De esta manera, la incipiente administración franquista creaba un organismo relacionado con otras instituciones anticomunistas extranjeras, como la International Anticommunist Entente, de Theodore Aubert o el Antikomintern alemán.

Tras la ocupación militar de una localidad, la OIPA registraba inmediatamente los locales de las organizaciones republicanas, batzokis del PNV, casas del pueblo de la UGT y de las agrupaciones socialistas, sedes del Partido Comunista de España, ateneos libertarios y logias masónicas. Todo ese material requisado era remitido a Salamanca, donde era analizado, clasificado y usado para fines de propaganda anticomunista, incluyendo la organización de exposiciones y la publicación de libros y folletos de esta naturaleza.

El primer jefe de la Oficina fue el ingeniero canario Laureano de Armas Gourié, hasta que en febrero de 1938 fue designado Marcelino Ulibarri Eguilaz, a la sazón jefe del Servicio de Recuperación de Documentos, adscrito también al Cuartel General del Generalísimo, y en el que quedó integrada de facto la OIPA. El Servicio de Recuperación de Documentos fue sustituido por la Delegación del Estado para la Recuperación de Documentos, creada por un Decreto de 26 de abril de 1938, y de la que también fue nombrado jefe Marcelino Ulibarri.