En razón de que la Capitanía General de la Artillería no se halla en condiciones de proveer armas y municiones para ser enviadas al puerto de Buenos Aires, manda que procedan a vender el cobre que se ha remitido desde Venezuela para que con lo procedido de ello acudan a la compra de dichas armas, municiones y pertrechos, cuya relación se acompaña.