Cantaor español, conocido artísticamente como Niño de Talavera.

Nació en Talavera de la Reina (Toledo) en 1905 y falleció en Guatemala en 1968.

Debutó en 1912, con siete años de edad. Empezó a actuar, desde muy joven, junto a grandes figuras del flamenco. Ganó un concurso de «cante jondo», en febrero de 1928, en el Teatro Duque de Rivas de Córdoba. En marzo de ese mismo año se presentó en Madrid, en el Monumental Cinema, en un espectáculo de «ópera flamenca» -propuesta escénica del empresario Carlos Hernández Delgado «Vedrines»-, con importantes cantaores como Angelillo (Ángel Sampedro Montero), Pena Hijo (José Muñoz Martín), Niño de Sevilla, Niño de Écija, Conchita Aguilar, Chaconcito y Juan Varea, acompañados a la guitarra por Marcelo Molina, Paco el de Pará y Manuel Martell. El 28 de abril actúo con este espectáculo en el Teatro López de Ayala de Badajoz, y en la plaza de toros de Granada en agosto de 1928.

El 16 de febrero de 1929 cantó en una función flamenca, en el Teatro Chueca de Madrid, en la que destacó la bailarina Laura de Santelmo. Cuando la compañía de Vicente Mauri estrenó en Barcelona, en el Teatro Victoria, en junio de ese año La copla andaluza, basada en la comedia de Antonio Quintero y Pascual Guillén, actuó con otros artistas como las bailaoras Custodia Romero, Concha Borrull, el bailaor Antonio Viruta, los cantaores Angelillo, Chato de Valencia y la cantaora Lola Cabello.

En 1930 se trasladó a París, donde fue contratado por la compañía Ballets Espagnols de Teresina, creada en la capital francesa por la bailarina y coreógrafa catalana Teresina Boronat. A esta compañía pertenecían también el bailarín Juan Martínez, el guitarrista Amalio Cuenca, los pianistas Maurice Bèché y Sinay János, y el director Francis Casadesus al frente de un conjunto de músicos de la Orchestre des concerts Straram. Se presentaron en el Théâtre des Champs Elysées de París, en abril de 1930, con el espectáculo Cuadro flamenco. En julio actuó en el Théâtre Municipal de Le Havre con una troupe de danza española, posteriormente en Rennes, Saint Jean de Luz, Riom y Annonay. El 19 de octubre de ese mismo año participó en el Festival de Bailes Españoles que presentaron las Hermanas Martínez -María y Emma, quien más tarde realizó su carrera en solitario como Mariemma- en la sala de fiestas de la Mairie de Aubervilliers (Île-de-France), con el guitarrista Ramón Montoya.

Ese año se estrenó la película La bodega, basada en la novela homónima de Vicente Blasco Ibáñez, dirigida por Benito Perojo. Esta producción franco-española se rodó como una cinta muda, pero se sonorizó en París antes de su presentación. Se añadieron algunas canciones interpretadas por Conchita Piquer, protagonista de la trama, y una saeta cantada por Niño de Talavera como fondo en una de las escenas más dramáticas del film.

De vuelta a España, participó en el estreno de la revista flamenca Claveles de España, en el Teatro Romea de Madrid, el 14 de julio de 1932. En este espectáculo, con arreglos musicales de José María Palomo, figuraban el actor Hilario Flores; la actriz, cantante y bailarina Rosarillo de Triana; la tiple cómica Pilar Esparza; los cantaores Pena Hijo y Angelillo; y los guitarristas Luis Yance y Manuel Torres; entre otros artistas. Al mes siguiente, la producción viajó a Barcelona, donde se incorporó la bailarina Lolita Gómez.

Unión Radio retransmitió una actuación suya con Niño Sabicas a la guitarra y una intervención de Ramón Gómez de la Serna, el 2 y 3 de febrero de 1935. Unos días después, el 24 del mismo mes, actuó en el Teatro Pavón de Madrid en un festival organizado por el grupo artístico Cultura Popular, en beneficio de los presos sociales, junto a figuras como Anita Flores, Juanito Valderrama y Niña de la Puebla. En mayo, en el Teatro Victoria de Madrid, cantó en La zambra de Chorro Jumo, «comedia de costumbres gitanas», con Niña Linares y Pepita Caballero. También en el Pavón, participó en el estreno de la «comedia flamenca» Una paloma perdía de Joaquín García Torres, el 28 de agosto de ese año; y en el de la zarzuela en tres actos Un pueblecito andaluz del compositor granadino Fernando Carrascosa Guervós, con letra de Rafael Fernández Shaw, el 20 de noviembre en el Teatro Maravillas de Madrid.

Considerado ya como una figura del flamenco, grabó entre 1935 y 1936 para La Voz de su Amo-Odeon cinco discos de pizarra que incluyen un repertorio de diferentes bulerías y fandangos, acompañado a la guitarra por Manolo de Badajoz.

Inició una gira, en febrero de 1936, con «Joyas del arte andaluz. Compañía de arte flamenco» encabezada por Paco El Americano. En el cartel destacaban la actriz Carmen Sánchez y la cantaora Pepita Caballero, entre un nutrido elenco de actores, cantaores y bailaores que formaban el «cuadro artístico de comedias líricas flamencas»; representaron títulos como La reja andaluza, Cancionera y Aquella jaca tan brava, entre otros. Durante la Guerra Civil española mantuvo su actividad artística. En agosto de 1937, cantando tarantas y granaínas, hizo el papel de El Cantaor, con el guitarrista El Chufa, en la ««tragedia popular» en cinco actos Santa Isabel de Ceres, de Alfonso Vidal y Planas, representada en Valencia por la compañía de comedias de Vicente Mauri. En estas fechas fue agente de la Comisaría General de Fronteras y Puertos.

Finalizada la contienda se fue a Francia. En septiembre de 1940 se encuentra en Burdeos, actuando en la sala Capucins en una «Gala espagnol». Participó en actos a beneficio de la Résistance Espagnole, como la «Grand Gala Franco-Espagnol» que tuvo lugar en París, en la que actuó con los bailarines de danza española Carmencita Cuesta y Juanito García.

Por otro lado, realizó algunas actuaciones en ciudades de la Francia ocupada. Por ejemplo, en febrero de 1942, en Le Havre cantó junto a la bailarina La Joselito (Carmen Gómez Asensio) y otros artistas a beneficio de la revista franquista El Hogar Espagnol. En otoño de ese mismo año actuó en París, también con La Joselito, Feli de Aragón, El Niño de Cádiz y el guitarrista Juan Relámpago, en el festival «La Quinzaine d'art espagnol», organizado por la Galerie Charpentier -con la colaboración de las autoridades franquistas y el Gobierno colaboracionista de Vichy-; y en el espectáculo de música, danza y declamación El Retablo, con la actriz Elvira Morla y el pintor José Zamora, entre otros.

El 25 de noviembre de 1945 participó en una "Gala de danses et de musique espagnoles" en la Salle Pleyel de París. En febrero de 1946 actuó en el Théâtre Municipal de Metz con la pianista Mercedes Bebia y el grupo de baile de Juanito García; también se presentaron en la ciudad de Troyes. Con motivo del XV aniversario de la II República española, el 14 de abril de 1946 se organizó en París, también en la Salle Pleyel, "La nuit d'Espagne", con la asistencia del Gobierno republicano en el exilio, bajo la presidencia de Diego Martínez Barrios; Niño de Talavera cantó en esta función en compañía de otros artistas. También en el espectáculo organizado por la revista española Galería en la Escuela Normal de Música de París, con el «danseur andalou» Juan Salido. Durante ese año y 1947 trabajó en La Puerta del Sol «cabaret espagnol de Paris», con Juanito García, Juan Granero y Conchita Castilla «et son ballet».

Llegó exiliado a México en 1948 acompañado de su esposa, Dolores Pérez Cabello, y se les concedió auxilio económico por parte del Comité Técnico CTAFARE de ayuda a los refugiados españoles. Ese mismo año coincidió en la capital mexicana con el guitarrista Sabicas (Agustín Castellón Campos), el bailaor Antonio de Triana (Antonio García Matos) y otros artistas flamencos exiliados, como Antonio de Córdoba, Niño del Brillante, Florencio Castelló y Malena Montes, entre muchos más, con los que compartió escenarios. Tiempo después, se trasladó a Guatemala donde abrió un restaurante y donde falleció en 1968. Siete años antes había vuelto a España de visita.