Institución
Monasterio de San Millán de la Cogolla (La Rioja, España)Otras formas
X
San Millán de la Cogolla es el resultado de dos dependencias religiosas primitivas. El primero, el monasterio situado en la montaña, conocido como San Millán de Suso, levantado en el lugar donde vivió y murió en el año 574, San Emiliano (San Millán). Este edificio tuvo gran actividad durante los siglos X y XI y seguramente seguía una regla visigótica.
El segundo, el monasterio de Yuso, situado en el valle, se comenzó a construir a mediados del siglo XI. Este nuevo establecimiento, heredero del de Suso, era ya benedictino; las dos casas mantuvieron sus actividades de forma paralela con sus abades propios hasta que en el 1100 el monasterio primitivo desapareció como tal, quedando como dependencia de Yuso que mantenía allí algunos monjes que lo cuidaban. El escritorio de Suso tuvo continuidad en Yuso, de donde salieron varios manuscritos que aún se conservan.
Con el tiempo el monasterio de San Millán de la Cogolla se convirtió en el más importante de este territorio respecto tanto a las casas benedictinas como de todas las demás órdenes. Hacia el siglo XVI la casa mantenía su poder económico aunque la comunidad había descendido en cuanto al número de sus miembros.
Durante los siglos XVI y XVIII se levantaron las construcciones actuales, de gran envergadura. Y en 1835 el monasterio fue suprimido, pero antes sufrió los efectos de la guerra de la Independencia (1809) y del Trienio Liberal, con sus exclaustraciones temporales, abandono y pérdida de bienes.
Tanto el monasterio de Yuso como el de Suso fueron declarados Bien de Interés Cultural en la categoría de Monumento el 3 de junio de 1931. Y por razones históricas, literarias, artísticas, así como el conjunto monumental, hicieron posible su declaración como Patrimonio de la Humanidad en diciembre de 1997.
Desde 1878 está ocupado por una comunidad de agustinos recoletos.
La biblioteca y el archivo están considerados como uno de los mejores conjuntos monásticos.
Real Decreto de 25 de julio de 1835 suprimiendo los monasterios y conventos de religiosos que no tengan 12 individuos profesos, de los cuales las dos terceras partes a lo menos sean de coro. Gaceta de Madrid núm. 211, de 29 de julio de 1835, páginas 841 a 842.
Real Decreto de 11 de octubre de 1835 suprimiendo los monacales. Gaceta de Madrid núm. 292, de 14 de octubre de 1835, página 1157.