Institución
Embajada de España en Londres (Reino Unido)Otras formas
1489
La segunda representación permanente de España en el extranjero, tras la de la Santa Sede, fue la de Inglaterra con sede en Londres a partir de 1489. Los orígenes de la misma se remontan a la misión que los Reyes Católicos encargaron a Rodrigo González de la Puebla, Juan de Sepúlveda y Diego de Guevara para tratar el matrimonio de la Infanta Dª Catalina de Aragón con el príncipe de Gales, Arturo, en el año 1487. González de Puebla continuó representando a sus soberanos en Londres desde 1489 hasta 1508, recibiendo el título de "embajador residente". Con los reyes Carlos I y Felipe II se mantiene la representación diplomática en Londres hasta la ruptura de relaciones bilaterales entre los años 1584 y 1603. Con los Austrias menores se restablecen hasta que vuelven a romperse en 1700, con la instauración borbónica en España y la Guerra de Sucesión Española. Tras la firma del Tratado de Utrecht de 1713, el nuevo rey borbón, Felipe V, restablece la embajada en Londres. Con Carlos III nace la Carrera Diplomática española: los puestos de Secretarios de las embajadas de París, Viena, Londres y Roma pasan a ser desempeñados por los oficiales de la Secretaría de Estado.
Las relaciones bilaterales de España y Reino Unido no se vieron nunca seriamente alteradas en el siglo XIX, salvo en los que respecta al contencioso sobre Gibraltar, cedido a Inglaterra por el Tratado de Utrecht.
En la historia decimonónica del Reino Unido se producen una serie de acontecimientos que influyen notablemente en el resto de los países europeos que pueden verse reflejadas en la producción documental de la embajada española en Londres: Tras la caída de Napoleón, el Reino Unido, inicia su hegemonía continental y empieza a forjarse el futuro Imperio Colonial inglés, caracterizado por su carácter marítimo y comercial. El desarrollo constitucional y democrático de las instituciones políticas inglesas servirá de modelo a las demás naciones europeas.
Durante la Guerra Civil Española de 1936-1939, Inglaterra prestó ayuda (personas, cargamentos, barcos, dinero, etc.) a la causa republicana, actuando la Embajada española de intermediaria.
Durante el desarrollo de la Guerra, el gobierno de Franco envió su propio representante a Londres (en la documentación aparece como delegación oficiosa), Jacobo Fitz-James Stuart y Falcó, duque de Alba, quien tras la contienda continuará hasta 1942 de embajador.
Los Congresos de Viena (1815) y de Aquisgrán (1818) establecieron a nivel internacional la clasificación de los agentes diplomáticos permanentes en cuatro categorías: 1) Legados y nuncios del Papa y embajadores; 2) Enviados extraordinarios, ministros, plenipotenciarios e internuncios; 3) ministros residentes y 4) encargados de negocios.
A finales del siglo XIX, el Instituto de Derecho Internacional, reunido en Cambridge en 1895, votó un reglamento sobre las inmunidades diplomáticas, destacando el privilegio de la inviolabilidad extensivo a todas las clases de agentes diplomáticos.
PARES: Código Referencia:ES.37274.CDMH/2.16.42// Signaturas: INCORPORADOS,1508 a 1575
PARES: Código Referencia:ES.28005.AGA/1.2.1.1.2.53.1//